Aumenta el consumo medio en supermercados y se disparan los gastos en ocio nocturno

  • El comportamiento de los consumidores en España durante la primera mitad de 2023 ha reflejado un cambio en los hábitos de gasto con tarjetas bancarias, según se observa en los recientes datos del análisis del neobanco Blackcatcard en comparación con el mismo periodo de 2022.
  • El número total de transacciones ha descendido en algunas categorías clave, como supermercados, restaurantes y tiendas diversas. Sin embargo, una constante generalizada ha sido el aumento del gasto medio por transacción.

Mientras que la inflación en España en el primer semestre de 2023 supuso un 4,06% de media, algunos de los patrones de comportamiento de los consumidores se correlacionaron con una respuesta a este cambio.

En el primer semestre de 2023, las transacciones en supermercados han experimentado un ligero descenso del 2,6%. Sin embargo, el gasto medio por transacción aumentó un 6,9%, de 26,57 euros a 28,40 euros. La cuota de los supermercados en las transacciones ha aumentado hasta el 26,4%, frente al 19,6% del año anterior.

El sector de los restaurantes ha seguido una trayectoria similar. El número de transacciones disminuyó un 6,4%, pero el gasto medio por visita aumentó un impresionante 25%, de 40,66 euros a 50,82 euros. La cuota total de transacciones en restaurantes también ha aumentado del 6,2 % al 8,0 %.

La comida rápida, favorita de muchos, ha experimentado un descenso tanto en el número de transacciones, que cayeron un 45,5%, como en el gasto medio, que disminuyó un 20%, de 17,78 a 14,21 euros. Esta disminución de las transacciones ha reducido su cuota del 3,7% al 2,8%.

Curiosamente, se ha observado un cambio significativo en el gasto en ocio nocturno. En 2022, los bares, coctelerías, discotecas, clubes nocturnos y tabernas solo representaban el 3% de las transacciones. En 2023, su cuota ha aumentado hasta el 6,4%. Además, se ha producido un aumento considerable del gasto medio en estos establecimientos, que pasó de 25,11 euros en 2022 a la asombrosa cifra de 45,98 euros en 2023.

Las tiendas y comercios especializados han visto disminuir su cuota de transacciones del 6,0% al 3,7%. El importe medio de las transacciones también se ha reducido, de 55,23 a 51,52 euros.

Las gasolineras, otro sector clave del gasto, han experimentado una transformación. Su cuota de transacciones se ha reducido ligeramente del 4,0% al 3,4%, y el gasto medio en estos puntos de venta aumentó un 23%, de 29,29 a 42,52 euros. Esto se correlaciona con las turbulencias económicas observadas en el primer semestre de 2022, cuando el uso del coche se limitó más de lo habitual, al dispararse el precio de la gasolina, que llegó a alcanzar los 2 euros por galón de media. Al volver a bajar a 1,77 euros en el primer semestre de 2023, el aumento medio de las transacciones ha reflejado la respuesta a esta dinámica. Además, la disminución en el número de transacciones podría ser orgánica, explicada por los hábitos formados como respuesta al aumento del precio de la gasolina en 2022, cuando muchos españoles consideraron reducir el uso del coche combinado con una tendencia general, en la que los consumidores están tratando de disminuir su huella medioambiental cambiando el coche por el transporte público y la mejora constante de la infraestructura de transporte público como respuesta.

Los datos proporcionan información crucial sobre el cambio de comportamiento de los consumidores en España, destacando las preferencias cambiantes y los posibles factores económicos que han influido en el gasto durante el primer semestre de 2023.

«Sean cuales sean los factores que han influido en el descenso de la actividad de consumo desde la pandemia de COVID19, los patrones de comportamiento han ido cambiando: las capacidades financieras de los españoles no han crecido, y la actividad de consumo ha ido disminuyendo», señala Olegs Chernyshevs, CTO de Blackcatcard.

«Ante el reto de estimular la actividad de los consumidores, tenemos que replantearnos nuestro enfoque», afirma Cernisevs. «Las soluciones de crédito tradicionales europeas no están especialmente evolucionadas y no consiguen aliviar la carga de los consumidores. Por eso, por ejemplo, los principales agentes del mercado minorista offline, así como los mercados online, estimulan a los consumidores con bonificaciones y devoluciones en efectivo a través de programas de fidelidad. Este enfoque permite al consumidor ahorrar dinero, manteniendo o incluso aumentando su actividad de compra. Al mismo tiempo, las tiendas minoristas o los mercados y sus socios afiliados, como los bancos, aumentan la fidelidad y la actividad de los clientes. Esta nueva estrategia podría ser la clave para revitalizar el mercado».