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viernes, diciembre 19, 2025
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Talma Servicios Aeroportuarios designa a Edgardo Carbonel como nuevo Gerente General de Perú

Edgardo Carbonel es Ingeniero Industrial por la UNI, con un MBA y una Maestría en Gestión y Desarrollo Inmobiliario por la Universidad ESAN. Arturo Cassinelli continúa en su cargo como Gerente General Corporativo de Talma para Perú, México, Ecuador y Colombia.

Talma, empresa líder en servicios aeroportuarios en Latinoamérica y perteneciente al Grupo Sandoval, anuncia el nombramiento de Edgardo Carbonel como nuevo Gerente General de Talma en Perú.

El ejecutivo cuenta con una sólida trayectoria de 25 años en el Grupo Sandoval. Se desempeñó como Gerente de Finanzas y Administración en Dinet (2001–2006), Gerente Corporativo de Finanzas y Administración del Grupo Sandoval (2006–2009), y, desde 2009, asumió el cargo de Gerente General de Inmobiliaria Koricancha, posición que ocupó durante 16 años.

Carbonel es Ingeniero Industrial por la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), con un MBA y una Maestría en Gestión y Desarrollo Inmobiliario por la Universidad ESAN. A lo largo de su trayectoria, ha mantenido una formación ejecutiva continua en materias clave para la gestión empresarial y el desarrollo estratégico.

Talma ratifica a Arturo Cassinelli como Gerente General Corporativo, con responsabilidad sobre las operaciones en Perú, México, Ecuador y Colombia, liderando la estrategia y los principales lineamientos de la organización en Latinoamérica.

En línea con su estructura regional, Talma cuenta con un equipo ejecutivo que lidera las operaciones en cada país. La Gerencia General en México está a cargo de Vladimir Muñoz; en Ecuador, de Delia Guerra; en Colombia, de Gonzalo Aristizábal; y en Perú, recientemente asumida por Edgardo Carbonel.

Grupo Reyna cuadruplica su oferta y apuesta por Miraflores y San Bartolo

Reyna Grupo Inmobiliaria, con más de 12 años de experiencia, destinará US$ 40 millones en el 2025 en siete desarrollos clave.La empresa explora otras oportunidades en Lima Top y mercados internacionales.

En un año clave para el sector inmobiliario, Reyna Grupo Inmobiliaria ha dado un salto significativo: su oferta de viviendas pasó de 100 unidades el año pasado a cerca de 400 en 2025. La firma peruana, con más de 12 años de experiencia, no solo crece en volumen, sino que también amplía sus horizontes geográficos con proyectos en zonas como Miraflores, Cercado de Lima y San Bartolo, consolidando su presencia en Lima Moderna, e ingresando en Lima Top y Sur.

El gerente comercial de Reyna Grupo Inmobiliaria, Josafat Jabbour, explicó que esta expansión responde a un plan estratégico que combina calidad, ubicación y precio competitivo. “Hemos cuadruplicado nuestra oferta porque el mercado lo permite y porque hemos sabido identificar terrenos con gran potencial”, señaló. Solo el proyecto Naara, ubicado en la cuadra 3 de la Avenida Universitaria en San Miguel, ofrece 22 pisos, 136 de estos nuevos departamentos, 8 áreas comunes y dos locales comerciales, con precios desde S/189,000.

Miraflores, Cercado y San Bartolo: la nueva apuesta

Entre las apuestas más destacadas se encuentra Caserta, el primer desarrollo de la empresa en Miraflores, actualmente con un 20% de avance en obras y previsto para entregarse entre diciembre de 2025 y enero de 2026. Otro proyecto en curso es Ako, en San Miguel, que comparte el mismo porcentaje de avance y cronograma de entrega. En términos comerciales, Caserta ya registra un 50% de unidades vendidas, mientras que Ako alcanza un 34% con 30 de sus 88 departamentos comprometidos.

El desembarco en San Bartolo también marca un hito para Grupo Reyna. El proyecto Salina, que se lanzará comercialmente en los próximos meses, busca atender la creciente demanda por viviendas cerca del mar, una tendencia que se aceleró tras la pandemia.

“Hoy muchas familias ven en San Bartolo no solo un lugar para una segunda vivienda, sino una opción para vivir de forma permanente, con mayor tranquilidad y conexión con la naturaleza”, afirmó Jabbour.

Asimismo, mencionó que el próximo lanzamiento será el proyecto Bran en el Cercado de Lima, que es una apuesta para familias jóvenes o inversionistas, ya que se encuentra en una ubicación estratégica cerca a la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).

A estas iniciativas se suman otros proyectos en San Miguel, algunos en preventa y otros próximos a lanzarse, cuya construcción arrancará a mediados de julio o durante el último trimestre del año. En total, el plan de 2025 contempla siete desarrollos inmobiliarios, con una inversión aproximada de US$ 40 millones.

Mirando al futuro, Reyna Grupo Inmobiliaria evalúa un crecimiento sostenible que incluya Lima Top, y a la vez manteniendo su enfoque en Lima Moderna, así como un posible ingreso a mercados internacionales en un plazo de tres a cinco años, con Estados Unidos y España en la mira. Para 2026, la meta es aún más ambiciosa: desarrollar entre nueve y diez proyectos con una inversión cercana a los US$ 48 millones.

 

Gino Bigioni, la marca peruana que conquista con calzado femenino de alta calidad

Desde Villa María del Triunfo, una marca creada con pasión, esfuerzo y visión ha logrado abrir camino en la industria de la moda, generando empleo digno, empoderando a decenas de peruanos y llevando el nombre del Perú con orgullo.

En un taller ubicado en Villa María del Triunfo, se gesta uno de los secretos mejor guardados de la moda en Perú: calzado femenino de alta gama hecho 100% en el país, con estándares internacionales y una esencia profundamente artesanal. Se trata de Gino Bigioni, la marca peruana liderada por David Gutiérrez, un emprendedor que decidió transformar su historia familiar en un proyecto que hoy emplea a más de 40 personas y va camino a convertirse en un referente de diseño y calidad.

“Gino Bigioni es el nombre de un italiano que vino de Florencia hace muchísimos años y fue maestro de mi papá. Él nos enseñó este arte con materiales y técnicas adelantadas a su época, y quise honrarlo continuando ese legado”, explica Gutiérrez, quien creció rodeado de cueros, hormas y pasión por el calzado.

La marca, que inició hace apenas cuatro años, se ha ganado el reconocimiento del sector gracias a su apuesta por el trabajo manual, el uso de materiales de altísima calidad —muchos importados directamente de Europa— y un enfoque en el diseño exclusivo para mujeres.

“El amor por este arte lo tengo desde niño. Pero emprender en esta industria en el Perú no es fácil. No hay centros de formación ni apoyo institucional. Aquí uno tiene que aprender todo en el camino y formar desde cero a su propio equipo”, comenta.

Y su equipo es, sin duda, una de las joyas más valiosas del proyecto. Mujeres que antes eran cosmetólogas, enfermeras o lideraban comedores populares hoy se desempeñan como artesanas expertas, tras haber encontrado en Gino Bigioni una segunda oportunidad. “Me enorgullece haber formado un espacio inclusivo. Me dijeron que en zapatería solo trabajaban hombres, pero aquí la mayoría son mujeres, y hacen un trabajo fino, minucioso, impecable”, destaca.

Actualmente, el taller da empleo a entre 30 y 40 personas de forma estable, y hasta 60 en temporadas altas. Gino Bigioni también externaliza trabajo artesanal a mujeres de provincias, fomentando así el desarrollo económico en otras regiones. “Para mí, generar empleo es tan importante como hacer un buen zapato”, afirma.

Pero David no se detiene ahí. Entre sus metas está abrir su propio atelier y, a largo plazo, cadenas de tiendas físicas donde pueda exhibir el verdadero valor de su producto. “No me puedo morir sin haber hecho eso. Quiero que Gino Bigioni esté en cada esquina del país, y que se reconozca el valor del trabajo hecho en Perú”.

En un mercado donde abundan los productos importados o de fabricación masiva, Gino Bigioni apuesta por lo contrario: lo hecho a mano, lo ético y lo sostenible. “Usamos cueros vacunos naturales y químicos a base de agua. Es más sostenible que el sintético, que en realidad contamina muchísimo más de lo que la gente cree”, aclara Gutiérrez, quien ha estudiado a fondo el impacto medioambiental de cada insumo.

La ética también es parte esencial del ADN de la marca. “Hacer las cosas bien, sin copiar ni hacerle daño a nadie. Esa es mi filosofía. Ayudo a quienes empiezan, aunque a veces no recibo lo mismo de vuelta. Pero eso no me desanima. Mi enfoque es construir, no competir de forma desleal”.

Finalmente, al ser consultado sobre qué mensaje daría a otros emprendedores, David lo tiene claro: “Perseveren. Rodéense de gente buena. Y no tiren la toalla. Si ya empezaron, no se detengan. Porque cuando uno ama lo que hace, tarde o temprano llega el momento de florecer”.

Con visión, talento y un corazón que late por la industria del calzado, Gino Bigioni demuestra que desde cualquier rincón del país —incluso desde Villa María del Triunfo— es posible crear productos de clase mundial y transformar vidas a través del trabajo.

XXV Expo Pyme: Exportaciones de las mypes llegaron a US$ 3 300 millones y pueden crecer más

Trabajo conjunto entre sectores público y privado es clave para impulsar las ventas del sector y su formalización. CCL propone creación de plataformas digitales para facilitar formalización, capacitación e internacionalización de las pequeñas empresas.

Las micro y pequeñas empresas peruanas vienen consolidándose en el mercado local y conquistando mercados internacionales, pero su potencial de crecimiento todavía es muy alto y puede aprovecharse con el trabajo conjunto del sector privado y del Estado, indicaron autoridades y expertos convocados a la XXV Expo Pyme 2025. “Del Perú al Mundo: Negocios globales para las mypes peruanas”, evento organizado por la Cámara de Comercio de Lima.

En la XXV Expo Pyme 2025, la ministra de Comercio Exterior y Turismo, Desilú León, destacó que el año pasado 6 772 mypes exportadoras lograron ventas conjuntas por US$ 3 300 millones, principalmente de productos agroindustriales y manufactureros como prendas de vestir.

León sostuvo que el Estado peruano seguirá impulsando que más mypes conquisten mercados internacionales con programas que facilitan el acceso a la información comercial y capacitan a los empresarios, además de anunciar que se ampliarán los acuerdos bilaterales con Uruguay y los Emiratos Árabes Unidos.

En la misma línea, el viceministro de Mype e Industria del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, César Quispe, señaló que, a nivel doméstico, las ventas en el mercado interno de este segmento empresarial fueron de S/ 315 095 millones en el 2024, generando 10.5 millones de empleos.

Trabajo conjunto con la CCL

Durante su participación en la XXV Expo Pyme 2025, el viceministro Quispe señaló que uno de los desafíos que se ha planteado su sector es promover la formalización, la misma que ya aumentó 2% hasta los 2.4 millones de mypes formales. Para ello, solicitó a la Cámara de Comercio de Lima un trabajo conjunto para la elaboración del reglamento de la nueva Ley de Mypes aprobada por el Congreso en abril último.

“Debemos trabajar para que el reglamento no distorsione el objetivo de la ley que es corregir la dispersión normativa y facilitar la formalización, desarrollo y competitividad de la micro y pequeña empresa”, dijo el viceministro.

Por su parte, la segunda vicepresidenta de la CCL, Gabriela Fiorini, saludó el interés del Estado por apoyar la formalización de las mypes e indicó que desde el Estado se debe impulsar de manera constante la revisión y optimización de los procesos que posibiliten la formalización empresarial.

Medidas a tomar

En ese sentido, consideró que una medida clave sería la creación de plataformas digitales que simplifiquen los procedimientos y reduzcan los costos, además de la asistencia técnica sobre todo en las zonas rurales, para disminuir la distancia que separa a los pequeños empresarios del aparato estatal.

“Otro de los retos es impulsar la transformación digital de las PYME, haciendo que las herramientas que ahora ofrecen el e-commerce y la inteligencia artificial, sean accesibles para ellas”, dijo y resaltó la intención del gobierno de crear un Centro Nacional de Inteligencia Artificial enfocado en mejorar tanto la seguridad ciudadana como la productividad de las pequeñas y medianas empresas, a través de aplicaciones de IA a costos asequibles.

Asimismo, de que se aprobara el Reglamento de la Ley de Promoción de la Inteligencia Artificial y el lanzamiento de una Estrategia Nacional de Seguridad Digital. Fiorini respaldó también que se anuncie la creación de una Plataforma Nacional de Talento Digital, para ofrecer cursos de nivel internacional en IA, ciberseguridad y desarrollo de software accesibles para los emprendedores y las PYMES.

“Confiamos en que estos anuncios se concreten a la brevedad y nosotros, desde la Cámara de Comercio de Lima estamos comprometidos a presentar propuestas que enriquezcan estas iniciativas y se traduzcan en oportunidades concretas para nuestras pequeñas y medianas empresas”, afirmó.

Mypes listas

Aunado a ello, Rodolfo Ojeda, presidente del Gremio de la Pequeña Empresa de la CCL, sostuvo que, hoy más que nunca, nuestras pequeñas empresas están listas para dar ese salto hacia la formalidad y la conquista de nuevos mercados. “Porque talento no nos falta, creatividad y empuje nos sobra”, exclamó.

En la XXV Expo Pyme, que concluye este 20 de junio en el Centro de Convenciones de la CCL, ministros, viceministros, embajadores, líderes empresariales y expertos internacionales buscan impulsar el crecimiento de las micro y pequeñas empresas. “Vamos a hablar de lo que realmente importa: de cómo internacionalizarnos, de cómo aprovechar los tratados de libre comercio, de cómo financiar nuestros crecimientos, de cómo llevar nuestras marcas productos y servicios a nuevos destinos”, detalló Ojeda.

China se expande en Latinoamérica y posiciona al Perú como hub marítimo y líder comercial con el Asia-Pacífico – APEC

Por Víctor Castañeda Guzmán

A lo largo de los años he comprendido que ningún método es único ni definitivo, y casi siempre conduce a resultados distintos. En este momento, el Perú ha optado por una estrategia discreta frente a las crecientes tensiones comerciales con los Estados Unidos. Esta aparente neutralidad nos está conduciendo a una transformación geoeconómica: convertirnos en el país mejor vinculado de América Latina con Asia, en particular con China, la actual locomotora del crecimiento global.

Sin embargo, esta proyección internacional no ha estado exenta de recelos. La mirada occidental sobre China suele estar impregnada de prejuicios. En la arena internacional, las exigencias diplomáticas no se distribuyen por igual: mientras que al régimen de Nicolás Maduro se le exige una transición democrática, a China no se le cuestiona con el mismo énfasis, debido a su historia, poder y modelo político. Desde la era de Deng Xiaoping, China ha desplegado una política exterior pragmática y expansiva, sintetizada en la iniciativa OBOR (One Belt One Road), que le ha permitido consolidar su presencia global, incluyendo América Latina.

Uno de los obstáculos persistentes en nuestra relación con China es el sesgo cultural que asume que todo lo que proviene de ese país es de baja calidad. Este prejuicio ha limitado durante años el posicionamiento de los productos peruanos en el mercado chino. Pero si miramos nuestra historia, como lo hace Ronald Bruce en su libro “Política Exterior Peruana en el Nuevo Milenio”, veremos que la estrategia de vinculación con potencias globales ha sido una constante: desde Ramón Castilla hasta José Balta, pasando por Nicolás de Piérola, el Perú ha buscado posicionarse como socio confiable de las grandes potencias para acceder a mercados, financiamiento y tecnología.

Actualmente, China es nuestro principal socio comercial. A pesar de ser uno de los mayores consumidores de recursos del planeta, aún no ha alcanzado plenamente el estatus de superpotencia. Para lograrlo, necesita asegurar el suministro global de materias primas y afianzar vínculos con países estratégicos. Es una oportunidad que debemos aprovechar, no solo para exportar, sino también para atraer tecnología e inversión. Como señaló Henry Kissinger en su obra “China”, Estados Unidos debe recordar cómo construyó su hegemonía: visibilizando su presencia y fortaleciendo alianzas globales.

El puerto de Chancay, en este contexto, representa un punto de inflexión geopolítica y comercial. Su impacto en la cuenca del Pacífico será determinante. Todas las rutas parecen converger hacia él, proyectando al Perú como un eje logístico clave entre América del Sur y Asia. Para ello, el país debe prepararse a nivel institucional, legal, diplomático y empresarial.

Esto exige una política exterior articulada y estratégica, donde converjan diplomacia, comercio, turismo, inversión y tecnología. China, que ha adquirido empresas estratégicas en EE. UU., está obligando a Washington a repensar su rol en el continente. Lo mismo puede ocurrir en América Latina si no se redefine el enfoque hacia nuestra región, superando el viejo “Destino Manifiesto” de Monroe.

En esta visión de largo plazo, el Estado peruano viene promoviendo instrumentos como las Zonas Francas y las Zonas Económicas Especiales (ZEE), pero bajo un enfoque renovado. Ya no se trata de otorgar beneficios tributarios a cambio de simples promesas de exportación, sino de condicionar esos beneficios a la inversión efectiva en infraestructura. Es decir: quien invierte, accede; quien no, queda fuera. Este giro busca reactivar el flujo de capital, generar empleo, atraer divisas y modernizar nuestra base productiva.

La propuesta de crear una Zona Económica Especial Privada (ZEEP) parte de este principio. Se trata de un modelo de clúster industrial-logístico administrado por un operador que articula diversas empresas bajo un régimen especial, siempre supervisado por el MINCETUR y la SUNAT. Su objetivo: convertir espacios portuarios en motores de desarrollo y polos de innovación productiva.

El Perú, posicionado estratégicamente en la cuenca del Pacífico, debe asumir un liderazgo regional en este nuevo orden marítimo-comercial. Esta visión será ampliamente debatida en el próximo congreso de la AAPA (Asociación Americana de Autoridades Portuarias), que se celebrará del 24 al 27 de junio en Lima. Allí, más de 600 expertos, autoridades, inversionistas y profesionales de 30 países analizarán el futuro de la industria portuaria latinoamericana: infraestructura, sostenibilidad, innovación y gobernanza.

Corporate influencers: los nuevos aliados del aprendizaje y la cultura corporativa

Los corporate influencers están transformando la forma en que las organizaciones comparten conocimiento, impulsan el cambio y fortalecen la colaboración.

Ya no es necesario tener un cargo gerencial para liderar el cambio dentro de una organización. Los llamados corporate influencers –colaboradores que inspiran, comunican con claridad y conectan con sus equipos- se han convertido en figuras clave para dinamizar el aprendizaje y reforzar la cultura interna. A diferencia de los líderes jerárquicos, estos influenciadores no necesitan títulos formales para ser escuchados. Se ganan la confianza de sus pares gracias a su autenticidad, cercanía y capacidad para traducir lo complejo en acciones concretas.

Según Campus Romero, plataforma especializada en capacitación corporativa, los corporate influencers representan hoy una ventaja competitiva para las empresas que apuestan por el aprendizaje entre pares. “La información ya no fluye únicamente desde arriba: fluye entre pares. Los corporate influencers tienen la capacidad de traducir lo estratégico a lo operativo y movilizar a los demás desde la cercanía, no desde la jerarquía”, afirma Rómulo Martínez, su director.

Su impacto es tangible: estudios estiman que pueden alcanzar hasta al 70 % de la fuerza laboral a través de redes informales, frente al 5 % que logran los líderes senior de forma directa. Este nivel de influencia redefine la forma en que se adoptan nuevas herramientas, se comprenden las políticas internas y se promueve la colaboración entre áreas. Sin embargo, su incorporación no está exento de retos. En ese sentido, el experto identifica cuatro puntos clave que las empresas deben abordar para aprovechar su potencial.

  1. Alinearlos con la cultura existente. Identificarlos no basta: es clave integrarlos con intención. Si la empresa penaliza el error o no fomenta el intercambio de ideas, su impacto se diluye. Deben sentirse parte activa del ecosistema de comunicación, sin temor a compartir ni a equivocarse.
  2. Falta de respaldo estructural. Aunque muchos líderes identifican de forma intuitiva a estos actores clave, pocas veces se establecen mecanismos para apoyarlos. Sin reconocimiento o soporte formal, su rol queda limitado a la buena voluntad individual, y con el tiempo, pierde fuerza.
  3. Riesgo de perder autenticidad. El valor del influencer está en su voz genuina. Si se perciben como voceros oficiales, su credibilidad puede verse afectada. Preservar su espontaneidad en un entorno saturado de mensajes y automatizaciones es un desafío que no se puede ignorar.
  4. Exceso de mensajes y ruido digital. Cuando todos comunican, cuesta discernir lo valioso. El influencer no es un amplificador, sino un filtro de sentido. Por eso, empresas líderes están usando análisis de redes organizacionales para detectar quién realmente mueve la aguja en la comunicación interna.

“Al apostar por los corporate influencers, las empresas facilitan una difusión del conocimiento más natural y con menos barreras internas. Se genera una cultura de aprendizaje colaborativo, donde las personas aprenden no solo de instructores, sino también de colegas en quienes confían. Es un enfoque que humaniza el aprendizaje y lo hace más efectivo”, agrega Martínez.

En ese sentido, las empresas que invierten en formarlos, reconocerlos y vincularlos a sus planes de capacitación están apostando por una organización más viva, más horizontal y más inteligente. Una organización que no solo entrena a su gente, sino que la escucha, la valora y la convierte en protagonista del conocimiento.