Por: María Lucero Chávez Tello
Desde el comienzo de la cuarentena por el covid-19, el consumo de energía eléctrica aumentó en un 20% en Lima, según Luz del Sur. Lo que beneficia en grandes sumas a las empresas de transporte de energía eléctrica.
Por consiguiente, Global Innovation Consulting, determinó que nos encontramos en la era de la industria consciente. De tal manera, es momento de expandir el almacenamiento de energía para vehículos eléctricos, las nuevas tecnologías, y así desarrollar innovación sostenible con materiales avanzados.
Al ser limitada la oferta de transporte público, los ciudadanos optan por movilizarse en scooters, bicicletas o motocicletas eléctricas, reduciendo la probabilidad de contagio. En el 2020, más de 25.000 vehículos eléctricos fueron importados desde mercados asiáticos, según la Cámara de Comercio de Lima. Otro ejemplo de éxito en este mercado es la empresa Tesla de Elon Musk, al convertirse en la segunda empresa automotriz del mundo. Sus automóviles eléctricos son un éxito rotundo, dominando la competencia en cuestión de términos de energía, utilizando paneles solares, desplazando al mercado petrolero. Sin embargo, la falta de un marco regulatorio y la pobre infraestructura impide que en el Perú se desarrollen mercados de autos eléctricos, que reducen hasta la tercera parte de un vehículo a gas, y la octava que a uno de gasolina. Sin embargo, es importante remarcar que grandes empresas a nivel mundial ya empezaron a tomar acciones para salvar el planeta.