La definición de la Zona Económica Especial permitirá captar operadores globales y mejorar los costos logísticos que impactan directamente en consumidores peruanos.
Chancay cumple su primer año como una pieza estratégica del sistema logístico del Perú, con una inversión que supera los 1,300 millones de dólares y una operación que apunta a convertirse en un centro regional con capacidad para mover hasta un millón de TEUs. Aunque el terminal avanza con tecnología, automatización y un crecimiento sostenido, aún depende de la emisión del reglamento de la Zona Económica Especial, la herramienta que definirá su atractivo para grandes empresas globales.
Estado del reglamento y su impacto en la atracción de inversiones
El asistente legal del Megapuerto de Chancay, Salvador Penagos, sostuvo que la ZEE ya cuenta con ley aprobada y que el Ejecutivo tiene noventa días para publicar el reglamento. Indicó que la norma estaría lista en un plazo cercano a dos semanas, algo que calificó como positivo para el país, ya que establecerá las reglas para operaciones de almacenamiento, valor agregado y servicios logísticos que hoy no están habilitados.
Las posibilidades para empresas como Temu
Paola Fune, gerenta de relaciones institucionales de Cosco Shipping, explicó que la ZEE es esencial para atraer operadores de comercio electrónico de gran escala. Según Fune, compañías como Temu no tienen condiciones para almacenar productos en Perú y la habilitación de la ZEE permitiría reducir costos de transporte, almacenamiento y distribución, algo que impactaría directamente en los bolsillos de los usuarios al abaratar la última milla logística.
El Plan de Desarrollo Urbano como pieza pendiente
Fune señaló que la aprobación del Plan de Desarrollo Urbano por parte de la Municipalidad Provincial de Huaral es otro requisito clave. Explicó que el crecimiento ordenado del entorno urbano es fundamental para acompañar la expansión del puerto, ya que la infraestructura portuaria y la ciudad deben avanzar de manera coordinada.
Capacidad operativa y productos estratégicos
El puerto opera actualmente en su fase uno con un movimiento cercano a trescientos cincuenta mil TEUs. Fune detalló que Chancay recibe naves de quinientos metros de eslora, y proyecta cerrar el año con quinientos mil TEUs. Penagos añadió que la capacidad diseñada para esta fase se orienta a un millón de TEUs y seis millones de toneladas anuales. Entre los productos que se movilizan destacan la palta peruana, los arándanos destinados al mercado asiático, los granos procedentes de Argentina y cargas diversas vinculadas al sector minero y de construcción. También se reciben vehículos eléctricos que luego se redistribuyen hacia mercados como Chile, lo que convierte a Chancay en un punto regional.
Automatización, tecnología e inclusión laboral
César Ausejo, jefe de software de Cosco Shipping, explicó que la automatización del puerto permite operar grúas de manera remota, lo que convierte actividades tradicionalmente físicas en funciones de oficina. Esta innovación abre oportunidades a trabajadores de todos los perfiles y elimina barreras relacionadas con capacidades físicas, edad o género. Según Fune, el 53 por ciento del personal pertenece a Chancay y el 20 por ciento corresponde a mujeres. Ausejo afirmó que la meta es que el crecimiento del puerto se traduzca en oportunidades directas para la población local.






