China construye una obra subterránea colosal para transformar la agricultura de Yunnan

El megaproyecto de abastecimiento de agua en Yunnan promete revolucionar la producción agrícola del suroeste chino y reforzar la seguridad alimentaria del país.

Una infraestructura que redefine la escala de la ingeniería china

Con 660 kilómetros de tuberías de acero de 4,2 metros de diámetro y más de 20.000 trabajadores involucrados, el Proyecto de Abastecimiento de Agua para la Región Central de Yunnan es una de las obras hidráulicas más ambiciosas en curso en China. Su objetivo es garantizar agua potable, industrial y agrícola para millones de personas, convirtiéndose en un pilar de la estrategia nacional de seguridad alimentaria.

El sistema capta agua del río Jinsha, afluente del Yangtsé, y la transporta hacia el interior de Yunnan atravesando montañas, fallas sísmicas y terrenos inestables. Solo los túneles presurizados alcanzan más de 611 kilómetros, lo que convierte esta infraestructura subterránea en una de las más extensas y complejas del planeta.

Tecnología y capacidad sin precedentes

El complejo incluye acueductos elevados, estaciones de bombeo, sifones invertidos y tuberías que cruzan hasta cuatro cuencas hidrográficas. Su capacidad de transporte, de 135 metros cúbicos por segundo, da cuenta de su magnitud. Se estima que beneficiará directamente a más de 11 millones de personas en 35 jurisdicciones, aportando anualmente 3.400 millones de metros cúbicos de agua para consumo humano, industrial, agrícola y ecológico.

Un caudal que puede transformar la agricultura

Para dimensionar su alcance, el caudal del sistema equivale casi al del río Negro en Argentina, que irriga unas 40.000 hectáreas frutícolas. Esta comparación permite entender el potencial agrícola que tendrá Yunnan, donde se espera irrigar decenas de miles de hectáreas adicionales, mejorar la productividad y reducir la vulnerabilidad ante la sequía.

Motor de la seguridad alimentaria china

El proyecto se enmarca en la política nacional de autosuficiencia alimentaria. China busca asegurar el suministro interno mediante la modernización rural y el uso eficiente del agua. En zonas como el condado de Yuanmou, el nuevo caudal ya permite la transición hacia cultivos de mayor valor, como frutas, hortalizas y flores, impulsando la producción agroindustrial.

Desafíos técnicos y sostenibilidad

La obra enfrenta retos geológicos y ambientales de gran magnitud. Para mitigar los impactos, se implementa un plan de monitoreo ecológico y se emplean materiales de alta resistencia, junto con sistemas automatizados que garantizan el flujo continuo incluso en áreas sísmicas. Con una inversión que supera los 80.000 millones de yuanes, el proyecto es una muestra de planificación a largo plazo.

Un hito de ingeniería con proyección global

Su finalización, prevista para fines de 2026, marcará un punto de inflexión en la gestión del agua en China. El proyecto no solo cambiará la realidad agrícola de Yunnan, sino que también consolidará la capacidad del país para enfrentar los desafíos del cambio climático y la seguridad alimentaria global.