El S&P 500 alcanzó un máximo histórico de 6,600 puntos impulsado por la expectativa de un recorte de tasas de la Reserva Federal, en medio de un escenario global marcado por tensiones comerciales, riesgos inflacionarios y movimientos corporativos de alto perfil.
En una jornada marcada por la expectativa de decisiones clave de política monetaria y por un inusual entrelazado de factores geopolíticos, corporativos y macroeconómicos, los mercados financieros globales se mueven con una mezcla de optimismo cauteloso y tensiones latentes. Estados Unidos, epicentro de la atención, se encamina hacia lo que los operadores consideran un recorte de tasas prácticamente asegurado por parte de la Reserva Federal, mientras que Europa y Asia absorben el impacto de datos económicos mixtos, movimientos corporativos de alto perfil y negociaciones diplomáticas de gran calado. El flujo de noticias refleja un mercado que, aunque impulsado por récords bursátiles y acuerdos estratégicos, sigue condicionado por riesgos inflacionarios, tensiones comerciales y reacomodos en la política monetaria global.
En Estados Unidos, el S&P 500 alcanzó un nuevo máximo histórico de 6.600 puntos, impulsado por la expectativa de un recorte de 25 puntos básicos en la tasa de referencia de la Fed, el primero desde la llegada de Trump a la presidencia. La combinación de señales de debilidad en el mercado laboral y la ausencia de sobresaltos inflacionarios consolidó las apuestas de los mercados monetarios. El rally bursátil, que acumula un avance de 14 billones de dólares en capitalización, se vio reforzado por el repunte de Tesla, cuyas acciones subieron 3,6% tras la compra de 1.000 millones de dólares en títulos por parte de Elon Musk, borrando las pérdidas acumuladas en 2025. Alphabet alcanzó una capitalización de 3 billones de dólares, mientras que un acuerdo marco para mantener operativa a TikTok en EE. UU. elevó el sentimiento inversor. El presidente Trump confirmó que conversará con su homólogo chino Xi Jinping el viernes para cerrar los términos del pacto, en un contexto en el que el Tesoro estadounidense, liderado por Bessent, destacó que las condiciones comerciales preservarán la seguridad nacional y permitirán mantener características chinas en la aplicación.
El mercado de bonos reflejó un descenso en los rendimientos de corto plazo, con los títulos a dos años acercándose a mínimos desde septiembre pasado, mientras el dólar retrocedía. En las subastas, el Tesoro colocó 73.000 millones de dólares en letras a seis meses con una tasa máxima de 3,715% y un bid-to-cover de 3,09, y 82.000 millones en letras a tres meses al 3,905% con una cobertura de 3,11. En el frente energético, los futuros del WTI para octubre cerraron en 63,30 dólares por barril (+0,97%), el Brent en 67,44 dólares (+0,67%), la gasolina en 2,0134 dólares por galón y el gas natural en 3,0430 dólares por MMBTU. El diésel se ubicó en 2,3311 dólares por galón.
En el plano político y comercial, las conversaciones en Madrid entre EE. UU. y China avanzaron hacia un consenso sobre TikTok, aunque persisten demandas chinas de concesiones arancelarias y tecnológicas. Bessent advirtió que, de no alcanzarse un acuerdo, podría considerarse un nuevo aplazamiento de la tregua arancelaria por 90 días antes del 10 de noviembre. También señaló que EE. UU. está dispuesto a endurecer sanciones contra Rusia, incluyendo a petroleras, y a utilizar activos rusos congelados, instando a Europa a compartir el esfuerzo para frenar los ingresos energéticos de Moscú. Paralelamente, el gobierno abrió una “ventana de inclusión” para tarifas sobre acero y aluminio, ampliando el espectro de productos sujetos a gravamen.
En el ámbito corporativo, Nvidia enfrenta una investigación de reguladores chinos por violaciones a la ley antimonopolio, mientras Fitch Ratings advirtió que la intervención estadounidense en el sector de semiconductores podría generar ineficiencias y presionar márgenes, aunque sin un impacto crediticio generalizado. La compañía reiteró su cumplimiento con la legislación china y su disposición a cooperar con las autoridades. En paralelo, PayPal anunció que integrará pagos P2P con criptomonedas, y el índice de Miedo y Codicia en criptoactivos se ubicó en 53/100 (neutral), tras haber marcado 58/100 (codicia) previamente.
En Europa, el tono estuvo marcado por declaraciones de miembros del BCE. Isabel Schnabel afirmó que el crecimiento superará el potencial y que los riesgos inflacionarios siguen sesgados al alza, mientras que Robert Holzmann y François Villeroy defendieron mantener las tasas en niveles actuales y mejorar la equidad fiscal. El Banco de Francia revisó al alza su previsión de crecimiento para 2025 a 0,7% (desde 0,6%), pero recortó las de 2026 y 2027 a 0,9% y 1,1%, respectivamente. En el frente macro, la balanza comercial de la Eurozona registró un superávit de 5.000 millones de euros (12.400 millones sin ajuste estacional), mientras la producción industrial cayó 1,8% interanual y subió 0,4% mensual. Alemania reportó un índice de precios mayoristas con alza interanual de 0,7% y caída mensual de 0,6%, y el índice ZEW de sentimiento económico se desplomó a 25 desde 34,7. Italia mostró superávits comerciales tanto con la UE (1.917 millones) como fuera de ella (5.990 millones), y Noruega registró un superávit comercial de 60.066 millones de coronas.
En Asia, los mercados se sumaron al rally global, con el MSCI Asia Pacific alcanzando máximos históricos. Sin embargo, los datos chinos mostraron una desaceleración más fuerte de lo previsto: la producción industrial creció 5,2% interanual en agosto (vs. 5,6% esperado), las ventas minoristas avanzaron 3,4% (vs. 3,8%), la inversión urbana acumulada subió apenas 0,5% y la tasa de desempleo se situó en 5,3%. Los precios de la vivienda nueva cayeron 0,3% mensual y 2,5% interanual. Pese a ello, el yuan se fortaleció y el dólar de Hong Kong alcanzó su nivel más alto en cuatro meses. Japón permaneció cerrado por festivo, mientras Corea del Sur reportó caídas en precios de exportación (-1% interanual) e importación (-2,2%). En Oceanía, el índice de precios de alimentos en Nueva Zelanda subió 0,3% mensual.
El panorama global presenta un delicado equilibrio entre euforia bursátil y riesgos latentes. El inminente recorte de tasas de la Fed podría actuar como catalizador de corto plazo, pero la persistencia de la inflación por encima del objetivo y la incertidumbre sobre la velocidad de futuros recortes limitarán el margen de expansión. Las tensiones comerciales EE. UU.-China, aunque parcialmente contenidas por el acuerdo marco sobre TikTok, siguen siendo un factor de riesgo, especialmente si se reactivan disputas arancelarias o tecnológicas. Europa enfrenta un crecimiento anémico y presiones inflacionarias que condicionan la política del BCE, mientras Asia lidia con la desaceleración china y la fragilidad de la demanda interna.
En el corto plazo, es probable que los mercados mantengan un sesgo alcista apoyado en la liquidez y en la narrativa de recortes de tasas, pero con alta sensibilidad a cualquier desviación en los datos macro o en el tono de los bancos centrales. Un escenario base contempla un ajuste monetario gradual en EE. UU., estabilidad relativa en Europa y estímulos selectivos en China, lo que sostendría los activos de riesgo. Sin embargo, un repunte inesperado de la inflación o un deterioro abrupto en las negociaciones geopolíticas podría revertir rápidamente el sentimiento, generando episodios de volatilidad significativa.






