Mientras EE. UU. muestra fortaleza en consumo y mercados, Europa y China enfrentan debilidad económica y señales de desaceleración.
En Estados Unidos, el índice de optimismo empresarial de la NFIB se situó en 98.20, apenas por debajo de la previsión de 98.3 y del dato previo de 98.80, reflejando un leve deterioro en la confianza de las pequeñas empresas. El Redbook reportó un crecimiento interanual de las ventas minoristas del 5.9%, superior al 5.7% anterior, lo que sugiere resiliencia en el consumo pese a la prolongada paralización del gobierno federal. Este shutdown, el más largo en la historia del país, parece encaminarse hacia su final tras la aprobación en el Senado de una medida de financiación temporal que mantendría abierto el grueso del gobierno hasta el 30 de enero y algunas agencias hasta septiembre. La Cámara de Representantes deberá decidir ahora si reabre oficialmente el gobierno, con el presidente Trump ya habiendo respaldado la iniciativa. La expectativa de reapertura impulsó un repunte bursátil: el S&P 500 recuperó pérdidas con unas 345 acciones al alza, mientras el Dow Jones Industrial Average avanzó 1.2%. FedEx, considerado un termómetro de la economía, subió más de 5% al anticipar mayores beneficios trimestrales respecto al año anterior. En contraste, Nvidia retrocedió 3% tras la venta de la totalidad de la participación de SoftBank en la compañía por 5.83 mil millones de dólares, operación destinada a financiar inversiones en inteligencia artificial. En el mercado de bonos, cerrado por el Día de los Veteranos, los futuros del Tesoro repuntaron apoyados en datos privados de ADP que mostraron una desaceleración del mercado laboral en la segunda mitad del mes pasado, en un contexto en el que los inversores dependen de cifras privadas ante la falta de datos oficiales por el cierre gubernamental. En paralelo, se registraron desequilibrios en las órdenes de cierre de mercado (MOC imbalance) con el S&P 500 mostrando +315 millones, el Nasdaq 100 +618 millones, el Dow 30 -15 millones y el grupo de las “Mag 7” con +118 millones, reflejando flujos de capital diferenciados entre índices.
En el ámbito corporativo, AMD acaparó la atención con una serie de declaraciones estratégicas de su CEO. La compañía espera que el crecimiento en centros de datos se acelere en el corto plazo, proyectando ingresos anuales por chips de data centers de 100 mil millones de dólares en un horizonte de cinco años. Además, anticipa un beneficio por acción superior a 20 dólares en los próximos 3 a 5 años, con márgenes operativos por encima del 35% y márgenes brutos entre 55% y 58%. La empresa ha excluido a China de su guía de ingresos, reflejando un ajuste estratégico frente a las tensiones comerciales y regulatorias. El CEO destacó también la disciplina en su relación con OpenAI, con planes específicos de expansión, y afirmó que no apostaría en contra de la compañía de inteligencia artificial. Estas proyecciones consolidan a AMD como un actor clave en el sector tecnológico, en un momento en que la competencia por liderazgo en inteligencia artificial y semiconductores se intensifica.
En Europa, los datos macroeconómicos mostraron señales mixtas. En Alemania, el índice ZEW de sentimiento económico se situó en 38.5, por debajo de la previsión de 41 y del dato previo de 39.3, mientras las condiciones actuales se ubicaron en -78.7, ligeramente peores que el -78.2 esperado pero mejores que el -80.0 anterior. En la Eurozona, las expectativas de la encuesta ZEW alcanzaron 25.0, superando el 22.7 previo. En el Reino Unido, la tasa de desempleo subió a 5.0% frente al 4.9% previsto y al 4.8% anterior, con un incremento de 29,000 desempleados y una caída de 22,000 empleos en el trimestre. Los ingresos semanales promedio crecieron 4.8% interanual, en línea con las expectativas, aunque los salarios sin bonus avanzaron 4.6%, mostrando cierta moderación. Estos datos reflejan tensiones en el mercado laboral británico, en un contexto de crecimiento económico limitado. En los Países Bajos, la inflación anual se situó en 3.1%, por debajo del 3.3% previo, mientras que en Italia la producción industrial cayó 1.5% mensual, mejorando respecto al -2.4% esperado. El discurso de varios miembros del BCE, incluyendo Vujcic, Sleijpen, Kocher y Escriva, se centró en la necesidad de mantener la estabilidad financiera ante un entorno de inflación moderada y crecimiento débil. En Alemania, el rendimiento del bono a 30 años se ubicó en 3.17%, con una cobertura de 1.4 veces, reflejando una demanda moderada en el mercado de deuda soberana.
En Asia, Japón registró un índice Tankan de fabricantes en +17 en noviembre frente a +8 en octubre, mostrando una mejora significativa en la confianza empresarial. El índice de no fabricantes se situó en +27, consolidando la recuperación del sector de servicios. El índice de precios al productor (PPI) japonés cayó a 2.5% interanual desde 2.7% previo, mientras que en términos mensuales se mantuvo en 0.3%. En Corea del Sur, la tasa de desempleo ajustada estacionalmente se mantuvo en 2.6%, en línea con las previsiones, aunque el empleo aumentó en 193,000 personas interanual, por debajo de las 312,000 registradas en septiembre, lo que refleja una desaceleración en la creación de puestos de trabajo. En China, los precios de la vivienda nueva cayeron 2.2% interanual, mientras la producción industrial avanzó 5.5%, por debajo del 6.5% previo. La inversión urbana acumulada retrocedió 0.8% frente al -0.5% anterior, y las ventas minoristas crecieron apenas 2.8%, por debajo del 3.0% esperado, confirmando la debilidad del consumo interno. La tasa de desempleo urbana se mantuvo en 5.2%, sin cambios respecto al dato anterior. En Australia, la tasa de desempleo se espera en 4.4%, frente al 4.5% previo, con un aumento de 20,000 empleos y una tasa de participación estable en 67%. En Nueva Zelanda, la llegada de visitantes se incrementó en 460 personas mensualmente, mientras la migración externa creció 7.5%, reflejando una recuperación gradual en el sector turístico.
En conclusión, el panorama de los mercados refleja una combinación de señales de resiliencia y fragilidad. En Estados Unidos, la inminente reapertura del gobierno y la fortaleza del consumo ofrecen un soporte temporal a los mercados, aunque la dependencia de datos privados limita la visibilidad sobre la política monetaria de la Reserva Federal. El sector corporativo, liderado por AMD, muestra un fuerte dinamismo en tecnología, mientras otras compañías como Nvidia enfrentan ajustes estratégicos. En Europa, la debilidad en el mercado laboral británico y la moderación en la confianza alemana sugieren un crecimiento limitado, mientras el BCE mantiene un tono prudente. En Asia, Japón y Corea del Sur muestran estabilidad relativa, pero China continúa evidenciando debilidad en consumo e inversión, lo que podría afectar la recuperación regional. De cara al futuro, los mercados enfrentan un escenario de volatilidad moderada, con oportunidades en sectores tecnológicos y de servicios, pero con riesgos asociados a la política fiscal estadounidense, la desaceleración china y la persistente fragilidad en Europa. La proyección apunta a un cierre de año con crecimiento desigual, donde la selectividad en inversiones será clave para capturar valor en un entorno de incertidumbre global.
Felipe Mendoza, Analista de mercados ATFX LATAM






