De acuerdo con datos de la Cámara Peruana de Desarrolladores Inmobiliarios (Codip), los mercados inmobiliarios en Lima Norte y Lima Sur muestran trayectorias divergentes que responden a factores económicos, urbanos y sociales, definiendo perfiles de demanda claramente diferenciados.
En Lima Norte, la expansión urbana está vinculada a una creciente clase media emergente que busca viviendas de menor metraje, con precios más accesibles y cercanía a polos comerciales consolidados. Este sector mantiene una alta demanda de departamentos en proyectos multifamiliares, impulsado por su conectividad y oferta de servicios.
Por el contrario, en Lima Sur, el mercado se orienta hacia segmentos con mayor capacidad adquisitiva, que buscan proyectos con valor agregado: urbanizaciones cerradas, departamentos de mayor tamaño, áreas verdes y proximidad a zonas de playa. La demanda aquí responde a familias que priorizan calidad de vida y espacios amplios, lo que ha favorecido el desarrollo de proyectos premium.
Expertos de Codip sostienen que en los próximos años la brecha entre ambas zonas continuará marcando el ritmo del sector: mientras Lima Norte seguirá consolidándose como un mercado masivo y competitivo, Lima Sur proyecta un crecimiento más selectivo, basado en exclusividad y plusvalía.
Estas dinámicas opuestas reflejan la diversidad socioeconómica de Lima Metropolitana y obligan a los desarrolladores a diseñar propuestas inmobiliarias ajustadas a las expectativas y posibilidades de cada público objetivo.






