Empleo fuerte, mercados débiles, la Fed vuelve a sacudir al mundo financiero

La volatilidad vuelve a tomar el control de los mercados globales en medio de un empleo estadounidense que sorprende al alza, dudas sobre los próximos movimientos de la Reserva Federal y señales mixtas desde Europa y Asia que reconfiguran el panorama financiero internacional.

Los mercados financieros internacionales atraviesan una fase de marcada volatilidad, en la que los datos macroeconómicos, las declaraciones de autoridades monetarias y los movimientos corporativos se entrelazan para configurar un panorama complejo. La sesión reciente ha estado dominada por la incertidumbre en torno a la política monetaria de la Reserva Federal, la evolución del empleo en Estados Unidos, la dinámica de los sectores tecnológicos y las tensiones en los mercados europeos y asiáticos. A continuación, se presenta un análisis exhaustivo de los acontecimientos más relevantes.

En Estados Unidos, la volatilidad reapareció en Wall Street con caídas generalizadas en los índices bursátiles y en el mercado de criptomonedas, reflejando las crecientes dudas sobre la capacidad de la Reserva Federal para reducir las tasas de interés en diciembre. Los datos de empleo mostraron un aumento de las nóminas no agrícolas de 119.000, muy por encima del pronóstico de 51.000 y del dato previo de 22.000, aunque con una revisión a la baja de 4.000 empleos. El desempleo se situó en 4,4%, frente al 4,3% esperado y anterior, mientras que las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo descendieron a 220.000 desde 228.000. Los ingresos promedio crecieron 3,8% interanual y 0,2% mensual, en línea con las expectativas, mientras que la participación laboral se mantuvo en 62,4%. El sector manufacturero perdió 6.000 empleos, mientras que el gobierno sumó 22.000 puestos, compensando parcialmente la debilidad en la industria. El índice de la Fed de Filadelfia se ubicó en -1,7, mostrando una ligera mejora respecto al -12,8 previo. La semana laboral promedio se mantuvo en 34,2 horas.

Las declaraciones de miembros de la Reserva Federal marcaron la pauta de la jornada. El presidente de la Fed de Chicago, Austan Goolsbee, enfatizó que los datos oficiales presentan limitaciones y que la inflación se mantiene estable en los últimos meses, aunque con riesgos de empeoramiento. Señaló que tras el recorte de tasas de septiembre consideraba que solo sería necesario un ajuste adicional en 2025, destacando la importancia de construir consensos dentro del Comité. Paralelamente, asesores de la Casa Blanca como Kevin Hassett sugirieron que los datos respaldan un recorte de tasas en la próxima reunión, aunque advirtieron que un eventual cierre gubernamental afectaría negativamente el crecimiento del cuarto trimestre, estimado en 2%. Los mercados de bonos reflejaron estas tensiones, con los rendimientos de los bonos a dos años descendiendo cuatro puntos básicos hasta 3,55%, mientras el dólar se mantuvo en máximos de seis meses. El índice de volatilidad VIX superó los 26 puntos, anticipando mayor nerviosismo en los mercados. La expiración de opciones por un valor nominal estimado de 3,1 billones de dólares añadió presión adicional. El S&P 500 retrocedió 1,6% tras un repunte previo de casi 2%, mientras que el Nasdaq 100 cayó 2,4%. Nvidia borró una ganancia inicial superior al 5% y terminó con una caída del 3%, reflejando las preocupaciones sobre valoraciones y grandes inversiones en el sector de inteligencia artificial. Bitcoin descendió por debajo de los 87.000 dólares, su nivel más bajo desde abril.

En el ámbito corporativo, Walmart presentó sus resultados del tercer trimestre de 2025, aunque sin cifras detalladas en el reporte, mientras que Alibaba prepara la publicación de sus resultados del segundo trimestre de 2026. Estos anuncios se producen en un contexto de fuerte corrección en los activos especulativos, particularmente en el sector tecnológico y en criptomonedas, donde los inversores minoristas han sufrido las mayores pérdidas.

En Europa, los datos macroeconómicos reflejaron un entorno de debilidad. El índice de precios al productor en Alemania cayó 1,8% interanual y aumentó apenas 0,1% mensual. En Francia, las subastas de bonos mostraron rendimientos al alza en los títulos a 3, 5 y 8 años, con una menor cobertura respecto a emisiones previas. La producción en construcción de la Eurozona retrocedió 0,49% mensual, mientras que la confianza del consumidor se mantuvo en -14,2. En el Reino Unido, las órdenes de la CBI se situaron en -37, mostrando una leve mejora frente al -38 anterior, aunque aún en terreno contractivo. La confianza del consumidor medida por GfK descendió a -18 desde -17. Los próximos días estarán marcados por la publicación de ventas minoristas y datos fiscales, así como por intervenciones de miembros del Banco de Inglaterra y del Banco Central Europeo, incluyendo a Christine Lagarde y Luis de Guindos. En Suiza, la balanza comercial alcanzó un superávit de 4.319 millones, mientras que en Suecia los precios al productor mostraron una caída mensual de 0,7% y un avance interanual de 0,5%.

En Asia, los mercados también enfrentan presiones. En Corea del Sur, el índice de precios al productor aumentó 1,5% interanual y 0,2% mensual, mientras que en Japón la inflación subyacente se mantiene en torno al 3%. El Banco de Japón, a través de su gobernador Kazuo Ueda, intervino en el debate sobre política monetaria, mientras que en China se reportaron incrementos en las exportaciones e importaciones de Hong Kong, con avances de 16,1% y 13,6% respectivamente. En Nueva Zelanda, la balanza comercial mostró un déficit de 1.355 millones, con exportaciones de 5.82 mil millones e importaciones de 7.18 mil millones. En Australia, los índices PMI de servicios y compuesto se mantuvieron en torno a 52 puntos, señalando expansión moderada. Los próximos días estarán marcados por la publicación de datos de inflación en Francia, Alemania y Japón, así como por reuniones del G20 y del OPEC+, que podrían definir el rumbo de los mercados energéticos.

El escenario actual refleja una confluencia de factores que incrementan la incertidumbre global: un mercado laboral estadounidense que muestra resiliencia, pero también señales de enfriamiento en sectores clave, una Reserva Federal dividida entre la necesidad de mantener la estabilidad y la presión por recortar tasas, y unos mercados financieros que reaccionan con fuertes oscilaciones ante cada dato y declaración. En Europa, la debilidad estructural persiste, con inflación contenida, pero crecimiento limitado, mientras que Asia enfrenta el reto de sostener la demanda interna en un contexto de comercio internacional volátil.

De cara al futuro, los mercados podrían enfrentar tres escenarios principales:

Escenario de estabilización moderada, con la Fed optando por mantener tasas en diciembre y evaluar nuevos recortes en 2025, lo que daría soporte a los activos de riesgo.

Escenario de corrección profunda, si los datos de inflación empeoran y obligan a la Fed a mantener una postura restrictiva, lo que afectaría especialmente a sectores especulativos como tecnología y criptomonedas.

Escenario de recuperación selectiva, en el que Europa y Asia logren sostener la actividad mediante estímulos fiscales y monetarios, mientras que Estados Unidos enfrenta un ajuste gradual en su mercado laboral.

En síntesis, el panorama exige cautela y diversificación, con especial atención a los sectores defensivos y a los activos de renta fija, que podrían beneficiarse de un entorno de mayor volatilidad y de expectativas de recortes de tasas en el mediano plazo.

Felipe Mendoza, Analista de mercados ATFX LATAM