La creatividad se consolida como una competencia esencial para el futuro laboral y un motor para el desarrollo del país.
La industria de la creatividad se proyecta que para el 2030 aporte el 10% del PBI mundial, según el Banco Asiático de Desarrollo. Un dato que confirma que la creatividad dejó de ser un atributo artístico para convertirse en un activo económico clave.
De acuerdo con un estudio de McKinsey & Company, las organizaciones que integran creatividad, analítica y propósito en su gestión duplican su crecimiento orgánico frente a aquellas que no lo hacen. Yuddy Gallegos, jefa académica de las Carreras Creativas de CERTUS, sostiene que “la creatividad no es una habilidad accesoria, sino un pilar esencial para la innovación y la competitividad. Formar profesionales que piensen estratégicamente y con visión creativa es clave para el desarrollo sostenible de las empresas y del país”.
Pero ¿qué significa ser creativo en el trabajo? Estas son las cinco habilidades que marcan la diferencia en cualquier carrera:
- Pensamiento visual: traducir ideas en imágenes o mensajes que conecten con las personas.
- Estrategia creativa: combinar intuición con análisis y entender al público.
- Dominio digital: crear, diseñar o comunicar en entornos tecnológicos.
- Innovación constante: adaptarse, experimentar y proponer nuevas soluciones.
- Colaboración. Trabajar en equipo, gestionar proyectos y hacer que las ideas se concreten.
“Las compañías buscan personas que comprendan los desafíos, propongan soluciones innovadoras y transformen los procesos desde la creatividad. Esa es la nueva ventaja competitiva”, comenta Gallegos.
En línea con esta transformación, el mercado laboral también evoluciona hacia perfiles con competencias más transversales y digitales. De acuerdo con el Foro Económico Mundial (2025), los puestos con mayor proyección incluyen diseñadores de experiencia de usuario (UX/UI designers), especialistas en marketing digital, analistas de datos, estrategas de marca y gestores de contenido. Estas posiciones reflejan una tendencia global hacia profesionales versátiles, capaces de combinar creatividad, tecnología y visión estratégica para generar valor dentro de las organizaciones.






