La empresa pesquera implementó una nueva matriz energética que reducirá 18% sus emisiones en Chimbote, consolidando su liderazgo en sostenibilidad industrial.
Transición energética con impacto real
TASA concretó la conversión de la matriz energética a gas natural en su planta de Chimbote, la de mayor capacidad operativa en la ciudad. Este cambio permitirá reducir 6,500 toneladas métricas de CO₂ al año, equivalente a un 18% de las emisiones de la planta. A nivel corporativo, representa una disminución del 3,71% en la huella de carbono total de la compañía.
Con el uso de 265,000 MMBTU de energía más limpia, la planta reemplazó combustibles pesados por una fuente más eficiente, sumándose a otras tres unidades que ya migraron al gas natural. “El resultado nos llena de orgullo. Este cambio nos permite reducir nuestras emisiones y operar de manera más sostenible, reafirmando nuestro compromiso con el entorno”, destacó Eduardo Chunga, superintendente de Planta Chimbote.
Innovación y sostenibilidad industrial
La conversión forma parte del programa de Producción Más Limpia, una iniciativa que impulsa el uso de tecnologías sostenibles y eficiencia energética en toda la organización. Entre los avances logrados se incluyen el sistema Shore Power, que permite alimentar las embarcaciones con energía eléctrica desde la planta, reduciendo el consumo de combustible, y el próximo proyecto de instalación de paneles solares en los barcos.
Hacia una industria pesquera baja en carbono
“En TASA creemos que la sostenibilidad no es una meta, sino un camino que se recorre cada día con decisiones concretas”, afirmó Antonio Olórtegui, gerente Legal y de Asuntos Corporativos. Según el ejecutivo, la compañía busca cumplir su meta ambiental hacia 2030, promoviendo una producción más limpia y eficiente en toda la cadena pesquera.
Con esta iniciativa, TASA consolida su liderazgo en sostenibilidad industrial y reafirma su compromiso con un futuro energético más responsable, marcando un hito para el sector pesquero peruano.






