El oro encadena tres alzas consecutivas y marca un nuevo récord ante la expectativa por la decisión de la Fed

El oro alcanza un nuevo récord tras tres jornadas consecutivas de ganancias, impulsado por el debilitamiento del dólar y las expectativas de un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal, mientras el petróleo también sube por tensiones geopolíticas y la política monetaria estadounidense.

El oro cerró la sesión de este martes con ganancias por tercera jornada consecutiva, marcando un nuevo récord nominal, mientras se afianzan las expectativas de recortes en la tasa de interés por parte de la Reserva Federal. El alza fue respaldada por el debilitamiento del dólar estadounidense y la caída generalizada de las tasas de interés a largo plazo, factores que disminuyen el costo de oportunidad de mantener el metal precioso.

A medida que el mercado se aproxima a la decisión de política monetaria del Fed, existe un consenso creciente de que se aplicará un recorte de aproximadamente 25 puntos básicos, y los operadores siguen de cerca cualquier indicio de que el comunicado o las proyecciones vengan acompañados de un tono dovish que favorezca recortes adicionales. Técnicamente, el oro se mantiene en una tendencia firme, apoyado por niveles de soporte cercanos a los recientemente superados, aunque está sujeto a correcciones de corto plazo, especialmente si se producen sorpresas macroeconómicas o un discurso más agresivo del Fed de lo esperado.

El mercado de petróleo cerró la sesión con una clara inclinación alcista, reflejando el incremento de la prima de riesgo asociada a las recientes tensiones geopolíticas, en particular los ataques con drones ucranianos contra refinerías rusas y puertos de exportación de crudo, que elevan el temor a interrupciones en el suministro desde Rusia, país que representa una parte relevante de la producción global. Adicionalmente, las expectativas de recortes de tasas de interés por parte de la Reserva Federal reforzaron el movimiento alcista, ya que una política monetaria más flexible debilita al dólar, reduciendo el costo de adquisición del petróleo en monedas extranjeras, lo que favorece precios más elevados. Al mismo tiempo, el mercado monitorea de cerca los niveles de inventarios y las señales de demanda, que si bien muestran cierto enfriamiento en algunos sectores, todavía no modifican de manera significativa el sesgo de riesgo de oferta que domina el escenario.