Brasil se posiciona como potencia económica emergente y reconfigura el mapa comercial global

Proyecciones del FMI, PwC y Standard Chartered prevén que Brasil supere los USD 4,4 billones en PPA hacia 2030, con impacto directo en la dinámica regional, las cadenas logísticas andinas y la relación con EE.UU. y China.

En un contexto global marcado por la rivalidad entre Estados Unidos y China, Brasil emerge como un nuevo polo de poder económico. Informes recientes del FMI, PwC y Standard Chartered proyectan que su Producto Interno Bruto (PIB), medido en paridad de poder adquisitivo (PPA), podría alcanzar los USD 4,4 billones en 2030. Esta cifra lo ubicaría por encima de varias potencias europeas y asiáticas, consolidando su lugar entre las economías más influyentes del mundo.

El ascenso brasileño se sustenta en tres pilares clave: una economía cada vez más diversificada con fuerte impulso en manufactura, tecnología y sostenibilidad; una matriz energética basada en fuentes limpias y renovables; y una agroindustria de escala global respaldada por innovación logística. Esta transformación lo convierte en un socio estratégico tanto para China —que financia infraestructura ferroviaria y portuaria— como para EE.UU., que busca ampliar su influencia comercial en el país.

En este contexto, Brasil se convierte también en plataforma regional de exportación y puente geopolítico, lo que genera oportunidades para Sudamérica. Para el Perú, el impacto es directo: crece la necesidad de acelerar proyectos como el Tren Bioceánico Amazónico, que conectará Piura con Santos y permitirá movilizar hasta 40 mil toneladas diarias de productos clave como soya, fosfatos y minerales. Se estima que esta infraestructura generará más de 193 mil empleos y permitirá reducir los costos logísticos a USD 0.07 por tonelada-kilómetro.

Este reposicionamiento de Brasil obliga a los países andinos a replantear sus estrategias de comercio exterior, inversión regional e integración productiva. La interconexión eléctrica, los corredores logísticos y la coordinación en foros como Mercosur, CAN o la Alianza del Pacífico, tomarán nuevo protagonismo ante el avance del gigante sudamericano como potencia mundial.