Colombia busca reducir su desbalance comercial con China mientras avanza su adhesión a la Franja y la Ruta y se abren nuevas opciones para productos agrícolas.
El déficit comercial entre Colombia y China volvió a encender las alertas, esta vez con un desbalance cercano a US$14.000 millones, una cifra que supera incluso el déficit comercial total del país. El tema fue central en el IX Diálogo China Colombia organizado por la Cámara Colombo China de Inversión y Comercio junto a la Embajada china, un espacio en el que se revisaron los avances y tensiones de la relación bilateral.
Una brecha persistente en el comercio bilateral
Carlos Ronderos, presidente de la Cámara Colombo China, explicó que el déficit comercial se mantiene como uno de los retos más delicados para ambos países. Recordó que el año pasado el desbalance con China ya había alcanzado US$12.392 millones y que en 2023 la situación fue similar, porque el déficit comercial total de Colombia fue menor al que mantenía específicamente con el gigante asiático. Actualmente Colombia exporta alrededor de US$3.000 millones e importa cerca de US$17.000 millones, lo que deja un hueco de entre US$14.000 y US$15.000 millones, según Ingrid Chaves, directora ejecutiva de la Cámara.
Franja y Ruta, una ventana para reducir el desbalance
Para Ronderos, la adhesión de Colombia a la Franja y la Ruta abre una oportunidad para equilibrar la relación comercial, porque permitirá un acceso más fluido a mercados estratégicos. Destacó que el mayor interés chino por productos agrícolas colombianos puede ayudar a corregir el déficit en los próximos años. Desde la Agencia de Desarrollo Rural se estima que, a partir de 2026, China podría importar cada año 80.000 toneladas de café, 15.000 toneladas de banano y 10.000 toneladas de cacao, volúmenes que, según las autoridades, mejorarían la balanza comercial y fortalecerían la agroindustria.
Sectores que podrían beneficiarse del acercamiento
La adhesión también busca impulsar proyectos de transición energética, agroindustria, reindustrialización del sector salud, infraestructura tecnológica y movilidad, áreas que podrían abrir nuevas rutas de inversión y cooperación. Para los gremios, si estas iniciativas se ejecutan con consistencia, podrían generar un retorno importante y corregir una brecha que hoy presiona la competitividad del país en su vínculo con China.






