Rio Tinto y Codelco apuestan por Nuevo Cobre: exploración y sostenibilidad en Atacama

La minera Nuevo Cobre inicia su camino en la Región de Atacama con un plan de exploración que busca consolidar el potencial geológico de la zona y afianzar la presencia de Rio Tinto en Chile.

Rodrigo Moscoso Restovic, gerente general de Nuevo Cobre, explicó que el joint venture entre la estatal Codelco y Rio Tinto se encuentra en las primeras fases de exploración y prospección geológica. Tras la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental para el proyecto de prospección “Dionisio”, la compañía tiene como meta definir en el corto y mediano plazo el potencial de cobre en el distrito de Potrerillos, según detalló en entrevista concedida a Revista Minera Crisol.

El liderazgo de Moscoso en la nueva apuesta minera

Ingeniero Civil Industrial por la Universidad de Atacama y MBA por el MIT, Rodrigo Moscoso acumula una trayectoria en proyectos de oro y cobre, con experiencia en planificación, estrategia y sostenibilidad. “En todos estos cargos, mi enfoque ha sido diseñar y ejecutar estrategias de largo plazo, siempre con un fuerte énfasis en sostenibilidad y en los principios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG)”, destacó.

El gerente asegura que retornar a Atacama para liderar este proyecto es una oportunidad única: “Me inspira profundamente el potencial que representa este proyecto y el valor que podría generar para la zona y su gente”.

Etapa inicial y trabajos ejecutados

Moscoso precisó que Nuevo Cobre se encuentra en la fase inicial, pero con información geológica relevante gracias a la antigua mina El Hueso, explotada en los años 90. Los estudios realizados han permitido reinterpretar sondajes previos y mapear el distrito en detalle. Además, Codelco y Rio Tinto impulsan un estudio conjunto para analizar sinergias con otros activos en la zona.

La hoja de ruta contempla avanzar en etapas: perforación, estudios de prefactibilidad y desarrollo de un Estudio de Impacto Ambiental, siguiendo la secuencia típica de un proyecto minero.

Rio Tinto, más allá de Nuevo Cobre

El ejecutivo recalcó que la presencia de Rio Tinto en Chile no se limita a este proyecto: “La compañía participa en dos joint ventures adicionales, una con Codelco y otra con Enami, enfocadas en el desarrollo de proyectos de litio en la región de Atacama”. Con ello, Rio Tinto consolida su apuesta de largo plazo en el país.

Retos y sostenibilidad

Uno de los desafíos clave será el acceso a recursos hídricos. Moscoso aseguró que la empresa prioriza soluciones sostenibles y que los estudios conceptuales incluyen alternativas para garantizar un suministro responsable.

En paralelo, la minera trabaja en el relacionamiento con comunidades locales e indígenas. “Nuestro enfoque ha sido escuchar, participar y construir una relación de largo plazo basada en la confianza”, subrayó.

Proyecciones

Hoy, Nuevo Cobre cuenta con cerca de 50 trabajadores, pero en el pico de perforación la cifra podría ascender a 200. La prioridad, sin embargo, sigue siendo avanzar con prudencia: “Aunque el optimismo por el proyecto es innegable, nuestra prioridad es avanzar de manera mesurada y responsable, asegurando que cada etapa construya una base sólida para la siguiente”.

Con la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental de prospección Dionisio, la compañía inicia un proceso clave para determinar el verdadero potencial del distrito minero de El Salvador-Potrerillos, con el objetivo de convertir a Nuevo Cobre en un proyecto ancla de Rio Tinto en Chile.