El precio del petróleo Brent subió más de 5%, superando los US$65 por barril, tras el anuncio de nuevas sanciones impuestas por la administración del presidente Donald Trump contra las dos mayores petroleras rusas: Rosneft y Lukoil.
Las medidas prohíben a las empresas estadounidenses mantener transacciones comerciales con ambas compañías, lo que podría alterar significativamente el flujo global de crudo y generar mayor volatilidad en los mercados energéticos internacionales.
Analistas advierten que estas sanciones podrían reducir la oferta mundial de petróleo a corto plazo, impulsando los precios y elevando la presión sobre los países importadores, especialmente en Europa y Asia.
El incremento del Brent marca un nuevo máximo en casi dos años, reflejando la sensibilidad del mercado ante tensiones geopolíticas y la creciente incertidumbre en la cadena de suministro energética global.






