La mayor compañía alimentaria del mundo inicia un ajuste estructural que reducirá su plantilla en un 6 %, apostando por la inteligencia artificial y la eficiencia operativa en medio de un entorno económico incierto.
Automatización y eficiencia: el nuevo eje de Nestlé
Nestlé anunció un plan de reestructuración global que implicará el recorte de alrededor de 16.000 empleos en los próximos dos años. La medida forma parte de su estrategia para reducir costos y acelerar la automatización de procesos en todas sus operaciones. Según informó la empresa suiza, unos 12.000 despidos afectarán principalmente a personal administrativo, mientras que los otros 4.000 se concentrarán en áreas de manufactura y cadena de suministro. En conjunto, el ajuste equivale al 6 % de su fuerza laboral.
El nuevo CEO, Philipp Navratil, explicó que los cambios son inevitables ante un escenario de transformación tecnológica y competencia global. “El mundo está cambiando y Nestlé necesita cambiar más rápido”, señaló, reconociendo que el proceso requerirá decisiones difíciles, pero necesarias para ganar agilidad y eficiencia operativa.
Inteligencia artificial como motor del cambio
La decisión llega en medio del avance acelerado de la inteligencia artificial (IA) y la automatización en las grandes corporaciones. Nestlé ya aplica IA en investigación y desarrollo, además de análisis avanzados en promociones, gestión de descuentos y exhibición en tiendas. El auge de estas tecnologías ha despertado preocupación por su impacto laboral, tema que también ha sido advertido por expertos del sector tecnológico, como el director ejecutivo de Anthropic.
Un contexto de tensión interna y económica
El anuncio ocurre semanas después de la destitución del anterior CEO, Laurent Freixe, tras una controversia interna por incumplir el código de conducta de la compañía. La reorganización busca recuperar la confianza del mercado y reforzar la rentabilidad en un entorno macroeconómico desafiante.
Pese al ajuste, Nestlé reportó un crecimiento orgánico del 4,3 % en el tercer trimestre y reafirmó su compromiso de mantener inversiones estratégicas a mediano plazo. El mayor mercado de la empresa sigue siendo América del Norte, donde los consumidores muestran preocupación por la inflación y los efectos de nuevos aranceles, aunque el gasto se ha mantenido estable.
Las acciones de Nestlé respondieron positivamente al anuncio: a las 7:30 a.m. (hora de Miami), subían un 7,6 %, reflejando la confianza del mercado en la estrategia de reestructuración.
