La Asociación Peruana de Energías Renovables defiende la modernización del sector eléctrico y señala que el modelo actual frena la competencia y encarece las tarifas.
La Asociación Peruana de Energías Renovables (SPR) ha respondido con firmeza a los cuestionamientos sobre la reglamentación de la reciente modificación de la Ley N° 28832. En un comunicado público, la organización subraya que los cambios propuestos al marco regulatorio eléctrico no solo son necesarios, sino urgentes, para garantizar un mercado más eficiente, competitivo y con tarifas justas para todos los peruanos.
Según la SPR, el actual diseño del mercado eléctrico ha generado distorsiones que perjudican directamente a los usuarios regulados —como hogares y pequeñas empresas— quienes pagan hasta 40% más que los usuarios libres. Esto, aseguran, es consecuencia de una contratación ineficiente y de un sistema que privilegia tecnologías antiguas y amortizadas, dificultando la entrada de nuevas fuentes limpias y económicas.
Uno de los principales problemas identificados es el uso de un precio subvalorado del gas natural para calcular el costo marginal de la electricidad, lo que impide una competencia real entre tecnologías. La SPR defiende que las nuevas licitaciones de largo plazo —como exige la Ley N° 32249— deben promover la incorporación de nueva infraestructura con criterios técnicos y de sostenibilidad.
La experiencia regional es clara: en países como Chile, la energía solar y eólica se licitan a precios muy por debajo de los actuales en Perú. El problema, según la asociación, no está en la tecnología, sino en un diseño de mercado que impide el acceso a las fuentes más competitivas.
En ese sentido, la SPR propone implementar un reglamento que establezca reglas claras, una planificación eficiente de la demanda y esquemas de contratación por bloques horarios, mecanismos que ya se aplican en otros mercados eléctricos del mundo. “El verdadero riesgo no está en cambiar las reglas, sino en mantener un sistema que excluye a nuevos actores y encarece la energía”, señalan.
La asociación concluye reafirmando su compromiso con un sistema eléctrico moderno y justo, en el que la competencia y la eficiencia sean las bases para ofrecer mejores precios y servicios a los peruanos.