La minería informal e ilícita que amenaza la biodiversidad, salud pública, la seguridad de comunidades y más.
La expansión de la minería ilegal cada vez se incrementa de manera negativa en diversas regiones del país causando daño y contaminación al medioambiente y a las comunidades que se encuentran cerca de la zona. Esta actividad ilícita provoca la degradación de suelos, contaminación del aire, pérdida de flora y fauna, así como los recursos hidrobiológicos, entre otros.
Diferentes zonas como arqueológicas, reservas naturales, cuerpos de agua entre otros espacios más afectados. En estos lugares, la actividad minera opera al margen de toda regulación, poniendo en riesgo no solo la biodiversidad, sino también la seguridad y el bienestar de las comunidades que viven en áreas aledañas.
Uno de los problemas más preocupantes es el Drenaje Ácido de Minas que es una de las formas más graves de la contaminación del agua resultante de la minería. Ello ocurre cuando minerales sulfurosos expuestos a la atmosfera se oxidan y de disuelven en agua teniendo como resultado negativo un drenaje ácido que causa daños a las familia y ecosistema.
Asimismo, la minería ilegal no solo ha causado graves consecuencias al medioambiente sino también el incremento de la violencia, grupos criminales, la socioeconomía del país y el deterioro de la salud pública.
Cabe señalar que, en el Perú, este fenómeno crece cada año, y la falta de estrategias efectivas limita la protección del medioambiente. Por ello, impulsar acciones concretas y sostenidas para frenar esta problemática es fundamental para resguardar el ecosistema y garantizar la estabilidad de las comunidades.
