La Inteligencia Artificial y la Robótica: el nuevo cerebro de la producción agropecuaria.

Por : Matías Repetto

La tecnología revoluciona la agroindustria con las innovaciones de maquinarias agrícolas y sistemas operativos que simplifican las cosechas y/o cultivos con eficiencia y seguridad, para elaborar un producto de calidad y eficiente para el mercado.

Las innovaciones tecnológicas pusieron a las industrias entre la espada y la pared. Porque cada actualización técnica digital representa una inversión económica fuete para seguir en el rubro y ser competitivo. En un mercado lleno de contrincantes feroces, que miran su empresa, pero están atentos de sus competidores para ver que hacen respecto a las innovaciones. Por eso la Agroindustria se despega del resto de las marcas e implemento la Agricultura 4.0.

Para 2026, el sector agropecuario consolida su transformación digital bajo el modelo “Agroindustria 4.0”, en donde la eficiencia y la sostenibilidad ambiental son las cuestiones principales del paradigma de gestión del sector. Este sistema estipula que para el año que viene la Inteligencia Artificial, mejor conocida por las siglas IA, alcance una presencia del 50% de lo cual permite que los sistemas experimentales dejen de ser experimentos y pasen hacer la columna vertebral del sistema rural.

Una cultura de trabajo llevada a la modernización tecnológica, el 2026, se presenta la oportunidad de implementar la IA y la analítica avanzada. Es decir, la inteligencia artificial no solo como analiza de datos sino una tecnología pensada para tomar decisiones autónomas y prevenir plagas y/o enfermedades a través de un diagnóstico. Mejor que el ojo humano.

La robótica y las maquinarias de última generación estiman un aumento sostenible de la explotación agrícola. Estas innovaciones comandadas por la IA se utilizarán en la siembra del cultivo y posteriormente en la cosecha de la tierra. Mientras que las cosechadoras y pulverizadoras se manejarán con mapas de precisión. Para eso es necesario la implementación de sensores de próxima generación que facilitaría el monitoreo de las hectáreas cultivadas, previniendo los niveles de nutrientes – como nitrógeno y el PH -, la humedad y/o temperatura del suelo a cultivar.

Al cuidar el cultivo se introducen drones específicos con cámaras para monitorizar el cultivo en sus diferentes facetas de crecimiento, previniendo la falta de agua o fertilizante.

El ambiente y la sostenibilidad presenta una disyuntiva en la agroindustria porque cuidar el planeta y sus recursos se volvió un tema principal en los empresarios del campo, para ver como cultivar y cosechar sin producir consecuencias a la tierra. Por eso, se plantea una agricultura de precisión, denominada “Semilla por Semilla”, en donde la digitalización permite que los granjeros trabajen de forma individual, en lugar de tener que controlar lotes completos. Se Optimiza el uso de insumos y reduce el impacto ambiental.

Las tecnologías avanzan y se emprendan en las industrias para mejorar el rendimiento de las fábricas, y producir un producto de calidad y que cumpla con la seguridad necesaria para su consumo. La agroindustria se actualiza todo el tiempo para ser ecología, sostenible y menos perjudicial para el ambiente.