Ingeniería para un Perú sostenible y resiliente

Mauricio Salazar Business & Technical Manager, Arcadis Perú

El progreso de una nación no solo se mide por su crecimiento económico, sino también por la calidad, seguridad y sostenibilidad de su infraestructura.

Los ingenieros, en este sentido, tenemos una enorme responsabilidad para el futuro del Perú. Desde la planificación urbana hasta los sistemas de saneamiento, desde las soluciones de movilidad hasta los proyectos energéticos, múltiples obras relevantes para nuestro desarrollo tienen detrás la visión estratégica y el compromiso técnico de ingenieros.

En Arcadis lo tenemos claro: nuestro trabajo va mucho más allá de entregar planos o supervisar obras. Más aún en un contexto donde la crisis climática, las nuevas exigencias regulatorias y de las comunidades, y la transición energética redefine nuestras prioridades, es crucial mantenernos a la vanguardia y actuar con sentido de urgencia.

Apostamos por una ingeniería integral, donde la tecnología, la innovación y el conocimiento técnico se articulan para generar impactos positivos y tangibles. Invertimos en automatización de procesos, utilizamos herramientas digitales de última generación y promovemos el trabajo colaborativo entre especialidades. Todo esto con un norte claro: mejorar la calidad de vida de las personas y proteger el planeta.

Desde la perspectiva técnica, nuestra disciplina es un actor central en la gestión de riesgos, asegurando la calidad de los proyectos a través de la búsqueda de soluciones innovadoras, cimentadas en la sostenibilidad y la responsabilidad. Las nuevas herramientas disponibles en el contexto de la transformación digital que experimentamos como sociedad, entre ellos los avances en inteligencia artificial, es fundamental para la ejecución de proyectos seguros, que beneficien a la sociedad y minimicen el impacto sobre el medioambiente.

No obstante, los desafíos son numerosos. El cambio climático, la necesidad de reducir emisiones y el imperativo de aumentar la resiliencia de nuestras ciudades nos exigen repensar la forma de diseñar y construir. Enfrentar estos retos implica una inversión continua en formación profesional y en el uso inteligente de tecnologías emergentes.

Valorar el trabajo de los ingenieros es reconocer su papel como articuladores del bienestar social y del desarrollo sostenible: necesitamos más profesionales altamente capacitados y dispuestos a liderar grandes transformaciones desde el propósito. En el Día del Ingeniero, reconocemos, además de la experiencia técnica; la vocación de servicio, la capacidad de innovar y el compromiso de construir un país más moderno y preparado para el futuro.