Recibir una suma importante de dinero, ya sea por una herencia, la venta de un inmueble o un bono excepcional, puede ser emocionante, pero también plantea grandes decisiones.
¿Lo gastas, lo ahorras o lo inviertes? Más allá del presente, estos momentos representan una oportunidad clave: sentar las bases de un patrimonio que trascienda generaciones.
Aquí es donde la asesoría en planificación patrimonial se convierte en una herramienta fundamental, pues no se trata solo de invertir, sino de contratar los servicios de un experto que diseñe una arquitectura financiera y legal para proteger y transferir el patrimonio de manera ordenada y eficiente, conectando sus objetivos y necesidades con oportunidades en mercados globales.
“Nuestro rol es ayudar a las personas a construir un puente sólido entre su éxito actual y el bienestar futuro de su familia. Siempre hay que preguntarse cuál es el valor de tener riqueza si no se tiene un plan de largo plazo, pues la verdadera riqueza no se mide solo en el valor de los activos, sino en la tranquilidad de saber que existe un plan claro para que nuestro dinero trabaje para nosotros y nuestros objetivos. En SURA Investments nos enfocamos en el ‘cómo’, que son las herramientas y estrategias concretas para que ese legado perdure”, señala Iván Zárate, Vicepresidente Senior en Perú de SURA Investments.
Frente a esto, el experto explica que SURA Investments facilita a sus clientes el logro de sus objetivos gracias a un proceso basado en cuatro pilares fundamentales:
- El primer paso es un mapa completo. El equipo de asesores trabaja con el cliente para entender su perfil y objetivos. El resultado es una hoja de ruta incluyendo un entendimiento cabal del perfil del inversionista y un perfil detallado de la inversión a realizar.
- Con los objetivos claros, se diseña la estructura. Esto incluye el acceso a inversiones sofisticadas y un portafolio con visión de largo plazo, pero va mucho más allá. Es posible explorar y estructurar incluso vehículos específicos buscando siempre la orientación tributaria y legal más eficiente.
- Un plan sucesorio es integral. El equipo de asesores actúa como un ‘director de orquesta’, coordinando a los distintos especialistas (abogados, contadores, notarios) para asegurar que todas las piezas de la estrategia funcionen en perfecta armonía.
- De nada sirve un patrimonio bien estructurado si los herederos no están preparados. Parte de la asesoría puede incluir la educación financiera de los sucesores, dándoles las herramientas y el conocimiento para que comprendan la responsabilidad de administrar el legado familiar y puedan preservarlo en el tiempo.
En un mundo cambiante, una estrategia robusta de Gestión Patrimonial no es un lujo, sino una necesidad, pues podría ser la diferencia entre un patrimonio que se desvanece y uno que se fortalece en el tiempo, habilitando una base asegurada para las futuras generaciones.