El valor del dólar en el Perú mantiene una tendencia a la baja. El martes 22 de julio, el tipo de cambio interbancario cerró en S/ 3.5550, operando entre S/ 3.5490 y S/ 3.5680 durante la jornada, informó el BCRP. En el mercado paralelo, el rango fue de S/ 3.545 a S/ 3.570
¿Se trata del nivel más bajo en cuatro años?
Sí. En comparación con 2021, cuando el dólar se disparó a S/ 4.10 durante la segunda vuelta presidencial, la situación actual refleja una fortaleza notable del sol. Desde aquel pico generado por la incertidumbre política, el tipo de cambio ha ido corrigiéndose de forma gradual hasta estabilizarse por debajo de los S/ 3.56.
¿Ya estaba pronunciado o es una normalización?
Más bien es una normalización progresiva, no una caída abrupta. El descenso actual es ordenado y se sustenta en factores macroeconómicos sólidos: estabilidad política, control de inflación y señales de menor aversión al riesgo global. No se observan los movimientos bruscos ni el pánico financiero que marcaron el 2021.
Factores que han estabilizado el sol
- Intervenciones del BCRP: venta de dólares y colocación de instrumentos financieros han amortiguado la volatilidad
- Recuperación económica: un PBI proyectado en 3.2 % para 2025 y una inflación controlada entre 1 % y 3 % fortalecen la moneda local
- Entorno internacional favorable: señales de política monetaria más relajada en EE.UU. respaldan monedas emergentes como el sol
¿Qué esperar en lo que queda del año?
Las proyecciones apuntan a oscilaciones en torno a S/ 3.75 para finales de 2025, mientras que algunos analistas mantienen expectativas de un dólar más barato, cercano a S/ 3.50, si no hay sorpresas globales. La clave estará en la evolución del entorno político local y la estrategia de la Reserva Federal.
El dólar ha regresado a niveles que no veíamos desde antes del último choque político de 2021. Lo que se observa ahora es una tendencia sostenida y previsible, lejos de caídas abruptas o picos de pánico financiero. El sol consolida una posición sólida, aunque con espacio para nuevas fluctuaciones según cómo se muevan los factores globales y la economía local.






