El Banco Central proyecta una expansión sostenida del Producto Bruto Interno en los próximos dos años, impulsada por los sectores no primarios, el consumo privado y la inversión, en un contexto de estabilidad macroeconómica.
La economía mantendría un crecimiento del 3,0 % tanto para 2026 como para 2027, según las proyecciones del Reporte de Inflación de diciembre de 2025 del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). Esta expansión refleja un escenario de estabilidad macroeconómica, luego del crecimiento estimado de 3,3 % para 2025.
De acuerdo con el ente emisor, el país alcanzaría su nivel de crecimiento potencial, estimado precisamente en 3,0 % para ambos años. Esto implica que la economía operaría de manera eficiente, utilizando plenamente sus recursos productivos y cerrando la brecha negativa del producto registrada en años anteriores.
Los motores del crecimiento: Sectores No Primarios
A diferencia de 2025, donde sectores primarios como el agropecuario impulsaron el PBI, el crecimiento en 2026 y 2027 estará sustentado principalmente en el buen desempeño de los sectores no primarios.
El sector servicios mostraría una expansión de 3,5 % en 2026 y 3,4 % en 2027, mientras que el comercio matendria una tasa constante de 3,0 % en ambos años. En tanto, la construcción avanzaría 2,5 % en 2026 y se aceleraría hasta 3,4 % en 2027, impulsada por proyectos de infraestructura de gran envergadura y la autoconstrucción.
EL gasto privado sostiene la expansión
El crecimiento económico estaría sostenido principalmente por la demanda interna, en particular por el gasto privado. El consumo privado registraría un incremento de 3,0 % anual, apoyado en la recuperación del empleo formal y del poder adquisitivo de los hogares.
Asimismo, la inversión privada fija crecería alrededor de 5,0 % en 2026 y 2027, favorecida por la ejecución de proyectos mineros como Tía María y Reposición Antamina, así como por obras de infraestructura como la Línea 2 del Metro de Lima y el Anillo Vial Periférico.
Supuestos en el escenario
El BCRP señala que estas proyecciones se sustentan en ciertos supuestos clave, entre ellos un proceso electoral ordenado en 2026, sin altos niveles de incertidumbre política; condiciones climáticas normales que no afecten a los sectores productivos; y un entorno internacional estable, pese a una leve corrección de los términos de intercambio prevista hacia 2027.
En conjunto, el crecimiento proyectado del 3 % representa un ritmo sostenible para la economía peruana, consistente con su capacidad productiva y sin generar presiones inflacionarias, siempre que se mantengan la estabilidad política y las condiciones externas favorables.






