Una inversión millonaria de origen chino marcará un antes y un después en la industria energética de Sudamérica. El gigante asiático construirá una plataforma petrolera flotante de gran envergadura, considerada sin precedentes en la región por su nivel de innovación tecnológica, seguridad y sostenibilidad.
El proyecto tiene como meta multiplicar la capacidad de extracción de petróleo, consolidando a Sudamérica como un polo estratégico en el abastecimiento energético global. Además, se espera que esta iniciativa genere un fuerte impacto económico en el país donde se ejecutará, a través de la creación de empleo especializado, la transferencia tecnológica y el fortalecimiento de la infraestructura energética.
China, principal socio comercial de varios países sudamericanos, continúa ampliando su presencia en sectores clave como la minería, energía y construcción, reafirmando su interés estratégico en la región.
La plataforma, diseñada bajo estándares internacionales, busca no solo aumentar la producción, sino también hacerlo de manera eficiente y sostenible, minimizando riesgos ambientales en las operaciones.






