Chancay y Huaral: El nuevo eje del boom inmobiliario en el norte chico… pero aún falta visión integral

Desde una mirada inmobiliaria, lo que está ocurriendo en Chancay y Huaral no es otra cosa que el inicio de una transformación urbana sin precedentes.

La construcción del megapuerto ha provocado un efecto dominó: el valor del suelo se ha disparado, la demanda de vivienda se proyecta hasta cinco veces mayor y ya se perfilan nuevas zonas residenciales, industriales y comerciales en lo que antes eran terrenos agrícolas o subvalorados.

Predios que costaban S/ 50 el m² hace solo unos meses, hoy se cotizan en más de US$ 200. Un salto de hasta 700% que pone sobre la mesa la urgencia de planificar con inteligencia y sostenibilidad.

La especialista Laura Oriundo señalo  «en desarrollo de zonas residenciales, identifico en esta explosión inmobiliaria tanto una gran oportunidad como una alerta: el crecimiento urbano debe ir acompañado de planificación integral, servicios básicos, espacios públicos, infraestructura vial y seguridad jurídica para los compradores.»

El Ministerio de Vivienda ha firmado un convenio con los municipios de Huaral, Chancay y Aucallama para diseñar un plan de desarrollo urbano. Es una buena señal, pero el reto está en la ejecución: tomar uno o dos años para identificar debilidades del suelo, zonas de riesgo y ordenar el uso de espacios no puede ir desconectado de la velocidad con la que se revalorizan los terrenos.

Chancay y Huaral tienen potencial para convertirse en el nuevo polo de inversión residencial del norte chico, pero para que ese futuro sea sostenible, debe construirse sobre un suelo urbano seguro, legalmente ordenado y con calidad de vida para los próximos 500 mil habitantes