Una de las señales más frecuentes es la fatiga, detectada por el 42% de los líderes, y exige respuestas antes del 2026.
El 75% de los trabajadores en América Latina afirman sentirse emocionalmente agotados al cierre del año, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Esta cifra no solo alerta sobre una mayor visibilidad de “burnout” en entornos laborales cada vez más exigentes, sino que coincide con un momento clave en las empresas: el cierre de las evaluaciones de desempeño.
Cuando los resultados muestran señales claras de desgaste o desalineación, las organizaciones deben actuar con rapidez y foco. “Las evaluaciones no son el final del proceso, sino el punto de partida para activar decisiones de desarrollo que fortalezcan el compromiso del equipo antes de iniciar el nuevo año”, señala Enori Larrabure, Senior Manager de Talent Solutions en Cornerstone.
Esa necesidad de intervención también se refleja en los datos internos. Un estudio de Cornerstone muestra que el 42% de los líderes en la región percibe que los cambios organizacionales y falta de claridad en los objetivos generan fatiga, lo que afecta el compromiso y la seguridad psicológica. Frente a este escenario, actuar a tiempo sobre el talento clave se vuelve esencial para evitar mayores costos humanos y estratégicos.
3 acciones para recomponer al talento clave
Desde su experiencia acompañando procesos de desarrollo organizacional, Enori Larrabure propone una ruta práctica para que las empresas realicen soluciones rápidas pero efectivas antes de cerrar el año:
- Planes de desarrollo express, para quienes no han alcanzado los objetivos esperados y muestran señales de agotamiento. “Estos espacios permiten redefinir prioridades y brindar herramientas para fomentar un cambio en la actitud del colaborador, tomando mayor conciencia de su rol”, afirma Larrabure.
- Team coaching focalizado, cuando varios integrantes del equipo reflejan falta de coordinación o desconexión. Estas sesiones ayudan a reconstruir acuerdos, mejorar la colaboración y recuperar la confianza en el equipo.
- Mentoring correctivo, para acompañar a profesionales clave que han asumido nuevas responsabilidades o gestionan grandes procesos de cambio y requieren acompañamiento para la toma de decisiones. “La diferencia entre fidelizar o perder talento suele estar en cómo se gestiona ese momento”, señala la ejecutiva.
Del diagnóstico a la evolución continua
Más allá del momento puntual de la evaluación, las organizaciones deben avanzar hacia una cultura de desarrollo continuo, como sugiere Cornerstone. Con habilidades técnicas que hoy tienen una vida útil de apenas 2 a 3 años, el reto no está solo en detectar brechas, sino en actuar con agilidad, propósito y visión de futuro.
“El cierre de año se debe aprovechar para demostrar liderazgo, escuchar al equipo y activar planes de desarrollo estratégicos que respondan al presente. Las organizaciones que actúan ahora estarán mejor preparadas para fidelizar talento clave y enfrentar el 2026 con equipos energizados, enfocados y alineados”, concluye Enori Larrabure.






