Aranceles: un desafío que impulsa a Perú a crecer en nuevos mercados y a generar más empleos

Frente a este nuevo panorama, es clave abrir nuevas puertas: diversificar mercados y apuntar a más destinos para nuestros productos.

El anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la imposición de un arancel del 10% a productos peruanos ha encendido las alertas en nuestra economía. ¿Por qué? Regiones como La Libertad, Ica y Piura, que destacan por su fuerza agroexportadora, tienen a EE. UU. como uno de sus principales mercados. Esta medida, cuya aplicación está prevista para julio, podría representar un reto para los exportadores, que deberán adaptarse a un nuevo escenario comercial. Sin embargo, también abre la oportunidad de diversificar mercados y fortalecer la competitividad de nuestros productos en el exterior.

Precisamente, la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES) ha identificado que el sector agropecuario podría enfrentar algunos desafíos.

Según cifras del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), al 2024, se generaron más de US$4.4 mil millones solo por envíos a Estados Unidos, lo que representó el 35% de las agroexportaciones nacionales. Entre los cultivos que más exportamos a ese mercado se encuentran la uva, el arándano, el café y el espárrago. Esta situación invita a seguir fortaleciendo la calidad, innovación y promoción de nuestros productos para mantener su posición en los mercados internacionales.

“Un arancel es un impuesto que un país puede aplicar a los productos importados, con el objetivo de proteger su producción local frente a la competencia externa. Así, ante el reciente anuncio, será clave realizar un seguimiento riguroso de sus posibles impactos, especialmente en sectores estratégicos como el agropecuario. Garantizar la competitividad de nuestra economía no solo requiere reacción oportuna, sino también coordinación entre el sector público y privado para proteger los empleos y mantener el dinamismo de nuestras exportaciones”, explicó Franco Saito, economista de REDES.

Próximos pasos: diversificación y nuevos mercados

Frente a este nuevo panorama, el especialista destacó la importancia de abrir nuevas puertas: diversificar mercados y apuntar a más destinos para nuestros productos. También propuso apostar por exportaciones con mayor valor agregado en la medida de lo posible, es decir, no solo enviar la materia prima, sino transformarla para ofrecer mejor calidad. Todo ello, resaltó, fortalece nuestras exportaciones, además de generar empleo y mayores ingresos para las familias peruanas.

Por otra parte, es importante recordar que Estados Unidos no solo ha impuesto aranceles a nuestro país, sino que lo ha hecho especialmente a potencias comerciales como China. A este país se le aplicó un impuesto del 145%. Para ponerlo en perspectiva: si por un producto chino que costaba US$ 100, antes se tenía que pagar US$ 25 por los impuestos, ahora se deberá pagar US$ 145 por el mismo concepto, más del doble del valor original. Otros países latinoamericanos, como Nicaragua y Venezuela, enfrentan tarifas del 18% y 15%, respectivamente.

En este contexto, sectores como el textil podrían verse directamente afectados. Saito explicó que la producción masiva de países asiáticos ya no priorizaría el mercado estadounidense y podría comenzar a dirigirse a otros destinos, como Perú, que mantiene tarifas arancelarias bajas. Existe la posibilidad de que esta situación sea una amenaza para el mercado interno, ya que productos importados, especialmente de origen chino, competirán en precio y volumen con los productos nacionales, desplazando la oferta local.

Sin embargo, añadió el economista, también podría ser una oportunidad estratégica para los productores peruanos. Actualmente, Perú exporta cerca de US$ 840 millones anuales en textiles a Estados Unidos, una cifra que podría aumentar si se actúa con rapidez e inteligencia. El hecho de contar con aranceles menores que otros países competidores nos brinda una ventaja competitiva que debe aprovecharse para incrementar nuestra presencia en el mercado estadounidense.

“En estas circunstancias es necesario trabajar de manera colectiva: desde pequeños productores hasta las autoridades y el sector privado. Con inversión en innovación, capacitación y acceso a tecnología, Perú podrá adaptarse a los nuevos retos del comercio internacional y fortalecer su competitividad. Para enfrentar este escenario, es clave fortalecer la capacidad de negociación y diversificación comercial. Con una visión estratégica, el país no solo podrá mitigar los efectos de las barreras comerciales globales, sino también posicionarse con mayor fuerza en el comercio internacional”. concluyó el especialista.