La ampliación del proceso de selección para los consejos directivos de Osinergmin, Sunass y Ositran es vista por el sector hidrocarburos como una oportunidad crítica para fortalecer la institucionalidad regulatoria y atraer liderazgo técnico independiente.
La reciente extensión del plazo para postular a los consejos directivos de los principales organismos reguladores del país —Osinergmin, Sunass y Ositran— ha encendido el debate sobre el futuro del desarrollo energético e infraestructura en el Perú. La Sociedad Peruana de Hidrocarburos (SPH) considera que esta coyuntura representa una oportunidad estratégica para reforzar la calidad técnica y la independencia de los entes reguladores, claves en la toma de decisiones que afectan tanto al sector empresarial como a los usuarios.
Según Tiffany Bayly, gerente general de la SPH, la ampliación del proceso hasta el viernes 20 de junio podría permitir atraer una mayor diversidad de profesionales altamente calificados, capaces de liderar cambios que modernicen y fortalezcan las capacidades regulatorias. “Contar con especialistas con visión estratégica es indispensable para fortalecer la institucionalidad, además de generar predictibilidad tanto para el sector empresarial como para los ciudadanos y usuarios”, subrayó.
Liderazgo técnico en sectores clave
Desde el gremio de hidrocarburos se ha remarcado que el rol de los reguladores trasciende la supervisión administrativa. En el caso de Osinergmin, su impacto cubre toda la cadena del sector hidrocarburos: desde la exploración y producción, hasta el transporte, refinación y comercialización de combustibles. La calidad de las decisiones técnicas, afirman, puede destrabar inversiones, viabilizar proyectos de masificación del gas natural y fomentar nuevas fuentes de energía.
Bayly enfatizó que, para que estos organismos puedan cumplir con su función de manera eficaz, es indispensable que cuenten con liderazgos técnicos sólidos y libres de presiones políticas. “Lo que necesita el país es una conducción técnica altamente calificada, con experiencia, capaz de liderar con eficiencia los procesos regulatorios que permitan el avance de proyectos estratégicos”, dijo.
Predictibilidad e inversión privada
En un entorno económico desafiante y con necesidad de atraer mayor inversión privada, el fortalecimiento de los reguladores se convierte también en una herramienta de competitividad. Las decisiones bien fundamentadas técnicamente no solo generan confianza en el sector privado, sino que permiten asegurar servicios eficientes y seguros para millones de ciudadanos.
Desde la SPH se insiste en que sin reguladores fuertes, técnicamente solventes e independientes, la sostenibilidad del crecimiento energético y la calidad del servicio en sectores clave como saneamiento, transporte e infraestructura, queda comprometida.
