A medida que se introduce la Inteligencia Artificial (IA), los servicios cloud, la domotización y un mayor uso de las redes sociales en las empresas, se van creando nuevos retos para el departamento de Compliance. En la actualidad, Compliance no solo busca combatir los riesgos core como prevenir la corrupción, contribuir a un mercado limpio o la protección de los datos personales, sino también deben adaptar sus propios procesos para formar parte de esta transformación digital.
“Los métodos tradicionales como: matrices de riesgo, capacitaciones presenciales o herramientas para el control de aprobaciones, resulta ser para la gestión del compliance, un recurso valioso gracias a su facilidad de uso, flexibilidad y funcionalidad. Sin embargo, éstos se ven enriquecidos a través de la automatización y digitalización e inclusive el uso prudente de social media”, detalló Patricia Vizcarra, Siemens Local Compliance Officer Perú & Ecuador.
En ese sentido, la especialista señala que resulta importante destacar algunas herramientas que ayudarán a desarrollar un Programa de Compliance con un enfoque más tecnológico:
- estas soluciones permiten el análisis en tiempo real de grandes conjuntos de datos, utilizando fuentes de datos tanto internas como externas. Por ello, los programas de Compliance pueden beneficiarse de esta automatización de información teniendo un esfuerzo manual menor, aumentando la disponibilidad de datos y generando un análisis de patrones más analítico.
- estos espacios se pueden implementar para realizar un análisis de datos que permitan el modelamiento de riesgos y análisis de patrones, como por ejemplo concordancia de nombres automatizadas en procesos de debida diligencia.
Por otro lado, sirve también para la visualización de resultados de controles de Compliance semi-automatizados y para configurar un aprendizaje automático que permita detectar situaciones comerciales de alto riesgo.
- , el uso de las redes sociales debe considerarse también para el proceso de búsqueda de información complementaria. La implementación, completamente automatizada, de radares contribuye en la obtención de key-data como post o tweets que estén relacionados con la compañía o potenciales terceros con riesgo significativo relacionados a Compliance.
“La tecnología facilita una mejorada gestión de Compliance en organizaciones que apuestan por la innovación y que buscan constantemente soluciones digitales, que incluyan también la mitigación de riesgos”, finalizó Vizcarra.