Aunque la canadiense Fortuna Mining reportó un trimestre récord a nivel global, su operación en Salta mostró una baja del 13% en producción de oro y un aumento en costos, impactada por factores locales.
La minera canadiense Fortuna Mining encendió las alarmas en el norte argentino. La empresa, que opera la mina de oro a cielo abierto Lindero, en Salta, Argentina, informó una caída en su producción de oro y un incremento relevante en sus costos operativos durante el primer trimestre de 2025, a contracorriente de los buenos resultados que obtuvo en sus otras unidades en América Latina y África.
Durante el primer trimestre, Lindero colocó 1,75 millones de toneladas de mineral en la plataforma de lixiviación, con una ley promedio de 0,55 gramos por tonelada. Sin embargo, la producción total fue de 20.320 onzas de oro, un 13% menos que en el mismo periodo de 2024. La empresa atribuyó esta caída a menores leyes de mineral y al cronograma de lixiviación.
El impacto no se limita a los volúmenes. El costo de efectivo por onza subió a US$1.147, frente a los US$1.008 del año anterior. Además, los costos de sostenimiento todo incluido (AISC) se dispararon a US$1.911 por onza vendida, frente a los US$1.511 del primer trimestre de 2024. Según Fortuna Mining, esta alza responde a la apreciación del peso argentino —que elevó los costos locales— y a una menor venta de onzas en el periodo.
El AISC incluye una ganancia por inversiones en bonos transfronterizos denominados en pesos argentinos de US$1,3 millones, inferior a los US$2,6 millones registrados en 2024, lo que también contribuyó al alza del indicador.
Pese a estos desafíos operativos y financieros, Fortuna informó la culminación del proyecto de expansión de la plataforma de lixiviación en Lindero al 31 de marzo, aunque aún se ejecutan tareas menores de cierre y desmovilización.
En contraste con el desempeño en Argentina, la empresa reportó un récord global en flujo de caja libre y un crecimiento sostenido en sus otras minas. La producción total consolidada del trimestre fue de 61.736 onzas de oro, mejor que en el mismo periodo del año anterior. Si se suman los equivalentes en oro (GEO), la producción fue de 71.229 onzas, con un leve repunte interanual.
Los resultados muestran cómo la situación macroeconómica argentina, incluyendo la volatilidad cambiaria y la presión inflacionaria, sigue impactando directamente en los costos de operación del sector minero, incluso para compañías con experiencia internacional como Fortuna. La empresa continúa monitoreando el entorno local y ajustando sus estrategias para sostener el rendimiento de Lindero en su portafolio global.






