5 claves para proteger y optimizar tus activos inmobiliarios

Realizar un plan de acción es la mejor garantía para operar en entornos seguros, eficientes y competitivos.

En la gestión de activos inmobiliarios, el proceso de due diligence en Facility Management (FM) se ha consolidado como herramienta clave para garantizar la eficiencia operativa, la seguridad y la rentabilidad de cualquier propiedad. Realizar un diagnóstico inicial exhaustivo permite anticipar riesgos, optimizar el presupuesto y tomar decisiones informadas desde el primer momento.

Según Carlos Herrera, Business Developer de Cushman & Wakefield Perú: “Es vital tener un diagnóstico inicial de la infraestructura y equipos, que nos ayude a tomar la data necesaria en los primeros 30 días para poder elevar al cliente la criticidad o no de sus activos. La idea es dirigir el presupuesto para aportar valor en la toma de decisiones, pero sobre todo a nivel económico, evitando generar costos innecesarios en mantenimientos y evaluando la vida útil de los mismos”.

A continuación, el ejecutivo comparte cinco consejos esenciales para un due diligence efectivo en la gestión de instalaciones y propiedades:

  • Evaluar el estado técnico de la infraestructura y equipos. Realizar inspecciones físicas y revisar los informes técnicos previos para identificar posibles riesgos y determinar la vida útil de cada activo. Un diagnóstico temprano permite anticipar necesidades y evitar imprevistos costosos.
  • Analizar el historial de mantenimiento y la vida útil de los activos. Reunir la documentación sobre mantenimientos anteriores y evalúa la situación actual de cada equipo. Esto permitirá diseñar un plan de mantenimiento preventivo, priorizando la inversión en los activos más críticos y evitando gastos innecesarios.
  • Verificar el cumplimiento normativo y regulatorio Asegurar de que la propiedad cumpla con todas las licencias, permisos y normativas exigidas por las autoridades. El cumplimiento legal es fundamental para la continuidad operativa y la tranquilidad de propietarios y arrendatarios.
  • Elaborar informes y recomendaciones prácticas. Generar un informe detallado que resuma los hallazgos y proponga acciones concretas. Este documento es esencial para la toma de decisiones estratégicas y la planificación de inversiones futuras.
  • Mantener la documentación actualizada y accesible. Gestionar de manera eficiente toda la información técnica y legal, asegurando su trazabilidad y actualización. Esto facilita auditorías, procesos de venta o reacondicionamiento, y demuestra el valor real de los activos ante terceros.

“El due diligence en Facility Management no solo protege la inversión, sino que también aporta transparencia y valor agregado a la gestión inmobiliaria. Realizar un plan de acción es la mejor garantía para operar en entornos seguros, eficientes y competitivos”, concluyó el especialista de Cushman & Wakefield.